La estirpe Luengo: de un molino a reyes de las legumbres
La comercialización de garbanzos, judías y lentejas cocidas impulsaron un mercado que iba a la baja
En 1921 era habitual ver a Gaspar Luengo Fernández recorriendo las explanadas infinitas que rodeaban La Bañeza, un pequeño municipio agrícola de Castilla y León. Era vecino del pueblo, y regentaba un molino de linaza y un granero. También había plantado varias garbanzos, judías y lentejas: las legumbres eran uno de los cultivos más característicos de la zona, junto con las patatas, la remolacha y los cereales. Hoy, más de cien años después, el apellido de la familia tiene un puesto de honor reservado a los estantes de conservas de los supermercados.
Con una facturación de 108,5 millones de euros en 2023, Luengo es la empresa líder del sector de las legumbres en España. En términos de facturación, por delante suyo, solo está el grupo Cidacos, que mueve alrededor de 500 millones cada año gracias a sus acuerdos con Mercadona. Ahora bien, sólo un 27% de estos ingresos proceden de las legumbres. Sea como fuere, ¿cómo lo ha hecho el linaje de Luengo para convertir su molino en uno de los actores empresariales clave del sector?
El crecimiento de la empresa no puede explicarse sin entender cómo ha florecido el mercado de las legumbres en España. En los últimos quince años el consumo se ha situado en torno a los tres kilos por persona, según los últimos datos de la Asociación de Legumbristas de España. Sus informes también sitúan a Cataluña como el tercer territorio del estado donde se come más y hace un ranking de las legumbres más consumidas: los garbanzos (1,4 kg/per cápita), las lentejas (0,92) y las judías blancas (0,9). Sin embargo, las cifras actuales del sector no se parecen nada a las que había en los inicios de Luengo. Cuando Gaspar trabajaba en su molino de La Bañeza, la producción y el consumo de estos alimentos eran esencialmente locales. No fue hasta la década de 1970 cuando todo cambió.
En aquellos tiempos la ingesta de legumbres había caído: si antes eran un alimento muy habitual en los platos –especialmente en épocas de vacas flacas– el aumento del poder adquisitivo y las nuevas tendencias gastronómicas que llegaban de otros países les fueron arrinconando. Luengo lo vio como una oportunidad. "Después de décadas vendiendo nuestras legumbres secas, en los años ochenta sacamos al mercado los botes de legumbres cocidas", rememora la compañía. Este formato revolucionó el sector. En una sociedad en la que cada vez había menos tiempo para cocinar, los botes de Luengo facilitaron la reincorporación de las legumbres en la dieta diaria, especialmente entre las familias con menos tiempo para cocinar.
El estallido de los Luengo
El negocio de los Luengo fue pasando de generación en generación hasta que a mediados de los años noventa Gaspar Luengo Asensio tomó las riendas del negocio. dispararse: si en 1995 rondaba los 12 millones de euros, en el 2017 ya superaba los 60. El crecimiento se explica, en parte, por la compra de varias empresas del sector.
Era una de sus principales competidoras. En el 2012 llegó a facturar 60 millones de euros, pero en el 2015 había entrado en concurso de acreedores. capacidad de producción", continúa el ejecutivo.
Desde entonces, y ya con la cuarta generación en el timón, la compañía tiene la sede y gran parte de la logística de envasado en una gran nave de 18.000 metros cuadrados en el municipio leonés de Riego de la Vega, junto a la carretera nacional. mantener la compañía en buena forma, a pesar del paso de los años: desde la gama Luengo Origen –con denominación de origen–, hasta legumbres secas y cocidas procedentes de agricultura ecológica, pasando por productos muy utilizados por las personas vegetarianas o veganas, como la soja texturizada Mientras tanto, pocos kilómetros más al sur, el centro de La Bañ de una de las antiguas instalaciones de Luengo, que se les quedó demasiado pequeña.
- 1921
Gaspar Luengo Fernández tiene un molino y un granero en La Bañeza
- 1950
Empieza a comercializar las legumbres secas bajo la marca Luengo
- 1980
La empresa hace frente a los cambios de hábitos de los consumidores españoles con los botes de legumbres cocidas
- 1995
Cambio de manos: Gaspar Luengo, la tercera generación, toma las riendas y moderniza la empresa
- 1996
Compra la empresa local Vegas Bañezanas, actual marca 'premium' de Luengo
- 2017
Luengo adquiere su principal competidor: Alimentos Naturales
- 2023
La compañía factura 108,5 millones de euros