Joan Turu: "Me considero anticapitalista total"

Ilustrador de murales infantiles en todo el territorio catalán, escritor de cuentos infantiles y comunicador innato desde que nació. Entre otras muchas cosas, es lo que hace Joan Turu (Sant Just Desvern, 1984) para ganarse la vida. De hecho, de pequeño ya era muy espabilado: "Mis padres siempre decían, ese niño no pasará hambre". Para poder comprar los cómics que le gustaban, con 12 años buscaba trabajitos de donde sacar el primer dinero: "Les ofrecía a los vecinos ir a pasear al perro", explica en declaraciones alEmpresas.

Turu estudió el bachillerato artístico y empezó su carrera de publicidad. No le gustó el planteamiento que hacían en la universidad y acabó estudiando ilustración. En este sentido, tiene una larga carrera ilustrando libros, camisetas, vinilos y también murales de escuela: "Antes hacía dos escuelas al mes, ahora hago una para hacerlo con muchas ganas". Esto le da unos ingresos estables mínimos cada mes, ahora que se ha tomado un curso para escribir una novela juvenil. "Actualmente, tengo tres años de lista de espera si todas las escuelas que me lo han pedido lo siguieran queriendo cuando les llegue el turno", explica el artista, que permanece unos dos días impartiendo el taller con los niños.

De hecho, Turu podría incorporar a más gente al equipo, y así realizar más proyectos, pero ésta no es su manera de trabajar: "Hago todo el trabajo yo, no contrato a nadie". Considera "tan importante contestar a un correo como estar pintando" y el artista quiere formar parte de todo el proceso creativo. "Si quedan contentos lo acaban recomendando. A mí lo que más me ha funcionado es el boca a boca", afirma el escritor.

Turu es muy crítico con el sistema económico: "Me considero anticapitalista total. Éste es un sistema alejado de lo que es la vida", remarca. Asegura que deberíamos poner los cuidados y la vida en el centro. Considera que el dinero es útil como moneda de cambio, pero el actual "es un sistema profundamente injusto", ya que todo el mundo debería tener las mismas oportunidades y no debería poder "especularse con el dinero o con los derechos básicos como por ejemplo la vivienda": "Yocreo en la renta básica universal, todo el mundo debe poder tener lo mínimo para vivir", ya partir de ahí quien quiera enriquecerse que trabaje más.

En el sector artístico el capitalismo también determina las reglas del juego: "Tu arte está ligado a las normas del mercado, tu sueldo depende de si vienes o no vienes. Esto es superperverso." "Añoro coger el lápiz por el puro placer", detalla el ilustrador. En su caso, tiene un volumen de trabajo suficiente para poder rechazar aquellas propuestas que no le encajan: "Si veo que algo no me hace sentir nada realizado, tengo el privilegio de poder decir que no". "Aunque todo el mundo tiene sus incoherencias", aclara. Por ejemplo, a veces Turu acepta proyectos de ayuntamientos bien remunerados para después poder hacer otros más en su línea: "La clave está en encontrar el equilibrio". Y no hacer nada con lo que se sienta completamente incómodo.

Vivir del arte

Por otra parte, Turu se siente afortunado de poder dedicarse únicamente al arte porque es difícil conseguirlo en este sector. En un inicio, el comunicador combinaba el trabajo de monitor de comedor con el de artista hasta que un día se lanzó a la piscina: "Me ha salido bien, pero en ese momento me solté de una liana sin tener claro si podría cogerme de otra. No sabía si podría seguir viviendo de esto". Además, reivindica que el trabajo tiene un valor: "Nadie debe trabajar gratuitamente". "Trabajo con amor, trabajo con arte, pero no trabajo por amor al arte. Tiene que haber un intercambio." El trabajo requiere un esfuerzo ya menudo en este sector, al tratarse de "pintar", se pasa por lo alto la remuneración: "Debemos aumentar la autoestima de la profesión. No puede que nos paguen a cambio de visibilidad".

Además, la recompensa no se cuenta con horas: "Mi sueldo no depende de las horas que le dedico." "Creo que es más justo cobrar en formato de derechos de autor que por el trabajo realizado". Todo el mundo debe enriquecerse de la misma manera, debemos perder y ganar igual. En cuanto a las finanzas personales, no es una persona planificadora: "Tenemos el dinero, lo hacemos; no lo tenemos, no lo hacemos". Por ejemplo, si no puede realizar la inversión en una nueva colección de vinilos, lo hará más adelante.