Martina Font, cajas y embalajes en un sector de 13.000 millones
La empresaria de Font Packaging Group y Kartox optará a la reelección como presidenta de la patronal Packaging Cluster
BarcelonaLos envases y el embalaje, que conocemos como packaging, nos rodean todos los días. Los encontramos tanto en los productos con los que llenamos la cesta de la compra como en los paquetes que nos llegan cuando hacemos pedidos de comercio electrónico. Pero, pese a su cotidianidad, es bastante desconocido como sector económico, se lamenta Martina Font, directora corporativa de Font Packaging Group y consejera delegada de Kartox, que se presentará a la reelección como presidenta del Packaging Cluster en la asamblea que celebrará la entidad el 19 de junio. Esta organización reúne a una parte importante del sector, con un total de más de 150 socios y con el objetivo de cerrar el 2025 con al menos 160, entre empresas, centros de conocimiento y entidades que representan toda la cadena de valor del embalaje.
Se trata de una actividad económica que factura en Cataluña unos 13.000 millones de euros anuales, el 25% de todo el negocio en España y entre el 4% y el 5% del producto interior bruto (PIB) catalán, con más de 720 empresas, muchas de ellas familiares y con más de 50.000 trabajadores en total. El negocio ha crecido en los últimos años impulsado por la industria y el comercio electrónico, lo que ha supuesto un aumento de la contratación. De hecho, uno de los retos sectoriales, que Font incluirá en el próximo plan estratégico 2026-2030 en el que trabaja con su equipo, es captar talento joven, dado que las plantillas se están envejeciendo. "Se necesitan relevos en los oficios más especializados" en un sector que requiere mucha investigación y desarrollo para cumplir los mandatos de la ley de los envases y residuos. La actividad de los embalajes afronta retos como la reducción del impacto ambiental y la reutilización.
El hecho es que es necesaria renovación de personal. Desaparecen tareas pesadas, pero nacen nuevas vinculadas con la digitalización. Otra de las asignaturas pendientes es ganar dimensión, porque el principal tejido productivo está formado por pequeñas empresas, así como la exportación no sólo de productos como ocurre hasta ahora, sino también de servicios. Una de sus vías es potenciar los proyectos colaborativos.
Packaging Cluster lidera o participa en algunos proyectos de ámbito europeo como el Value4Pack, para reforzar las colaboraciones entre regiones europeas para impulsar la innovación en la cadena de valor de los envases alimenticios; o Epic, que busca desarrollar la capacidad de innovación en regiones menos desarrolladas, conectando los actores de la cadena de valor del packaging para impulsar soluciones sostenibles. Otro de los proyectos es Oxicook, para estudiar diferentes estrategias para minimizar el desperdicio de los productos cárnicos cocidos cortados y envasados en atmósfera protectora durante su vida útil comercial. Es multisectorial. Participan, por un lado, empresas de la cadena de valor de la industria agroalimentaria (Carinsa, La Selva, Monells y Noel) y otros productores y envasadores; y, por otra parte, firmas del sector del packaging (Enplatero, TPL, Kao Chimigraf, Ulma y Multivac) yrepresentantes de la investigación tecnológica colaborativa con el Instituto de Investigación y Tecnologías Agroalimentarias (IRTA); establecimientos especializados en alimentación (BonPreu Esclat y Almendro Origen) y agrupaciones empresariales, con el Packaging Cluster como coordinador, y Hispack y FECIC.
Todo tipo de materiales
El sector está formado por compañías que trabajan con todo tipo de materiales, desde el cartón al plástico, el vidrio y el metal y, por tanto, tienen diferentes tipos de necesidades. Uno de sus rasgos es la apuesta por la innovación y la reducción del impacto ambiental, con la incorporación por ejemplo de material reciclado. En cualquier caso, "debe haber un equilibrio entre el hecho de que las innovaciones sean sostenibles y la competitividad".
Aunque inicialmente los pasos de Martina Font no parecían encaminados hacia el negocio familiar a través de Font Packaging Group, finalmente terminó en esta empresa, fundada por su abuelo, y ha roto el viejo principio según el cual la primera generación de la empresa familiar crea el negocio, la segunda lo consolida y la tercera se le carga. Ha sido todo lo contrario, porque trabaja como directora corporativa, con su hermano Francisco de director general y su hermana María como responsable de innovación. Las ventas alcanzan los 60 millones de euros.
Pero Martina Font, que también es vicepresidenta segunda de la Cámara de Comercio y forma parte de la junta directiva de Pimec y es vocal de Fira de Barcelona, no tenía suficiente. Después de estudiar un año en Suecia quiso importar un modelo de negocio dee-commerce de embalajes, pero el mercado todavía no estaba preparado, recuerda. Insistió y finalmente constituyó en el 2013 Kartox, de la que forma parte también la familia: es la consejera delegada y ha cumplido ya su primera década facturando actualmente unos 5 millones de euros.