España recibirá 10.500 millones más en ayudas directas del fondo europeo antipandemia
La cifra aumenta después de que se haya actualizado la asignación con las cifras de otoño
Bruselas / MadridEspaña recibirá 10.500 millones de euros más de los previstos en ayudas directas del fondo europeo antipandemia. El volumen final se incrementa, tal como ha avanzado este jueves El Mundo y han confirmado al ARA fuentes del ministerio de Economía, porque la Comisión Europea ha actualizado el cálculo con los datos económicos del otoño. España tenía que recibir 72.700 millones de euros en ayudas directas, es decir, fondos que no se tienen que devolver, pero esta cifra se amplía ligeramente porque una de las partidas planificadas se amplía de 58.968 millones a 69.528 millones, y deja la cifra final en 83.200 millones en ayudas.
A principios de noviembre pasado, la Comisión Europea empeoró considerablemente las previsiones de caída de la economía española. Auguraba un batacazo el doble de fuerte que el que sufriría la economía alemana. En concreto, una caída del 12,4% del PIB en el 2020 y un especial impacto en el mercado laboral, en el que se prevé que España encabece las cifras de paro de la Unión. Por eso, mientras los textos legales sobre los fondos antipandemia pasan los últimos trámites en la Eurocámara, los servicios de la Comisión han actualizado el cálculo a favor del Estado. Justo es decir que hay otra revisión prevista para el 2022 que podría conllevar nuevos cambios.
Este plan de recuperación de emergencia está pensado para ayudar a los países más maltratados por la pandemia y la exposición de España es especialmente alta debido a su dependencia del sector servicios y turístico, dos de los más afectados por las medidas de confinamiento.
Para recapitular, las cabezas de estado y de gobierno de la Unión Europea aprobaron el julio pasado un plan de recuperación económica sin precedentes ante el impacto de la primera oleada de la pandemia del coronavirus en Europa. En total son 750.000 millones de euros, que se concederán en forma de créditos (390.000 millones de ellos en ayudas directas). Del total del fondo, España tiene acceso a unos 140.000 millones. El gobierno español ya ha prometido "movilizar 72.000 millones", la cantidad prevista en ayudas a fondo perdido que ahora aumenta en 10.500 millones de euros. De hecho, en el presupuesto aprobado para este año ya hay 27.000 millones previstos.
No obstante, la tramitación de todos los textos todavía no se ha completado. El plan de recuperación pasó una turbulenta negociación entre Eurocámara y gobiernos a finales del año pasado, por cuestiones espinosas como el mecanismo que liga el desembolso del dinero al cumplimiento del estado de derecho (principios democráticos y de separación de poderes). Hungría y Polonia se valieron del derecho a veto para bloquear los trámites y finalmente consiguieron rebajar el mecanismo.
Pero este periplo todavía no ha terminado. la Eurocámara tiene que acabar de dar luz verde a los textos legales, un trámite que no se prevé complicado, pero también los Parlamentos estatales tienen que de dar luz verde individualmente ya que para conseguir los 750.000 millones la Comisión Europea se tiene que endeudar. Este es un trámite temido por Bruselas porque depende mucho más de las dinámicas estatales y las mayorías parlamentarias de cada socio comunitario. Justamente acaban de caer los gobiernos italiano y holandés y la reconfiguración de diferentes mayorías puede afectar los tiempos o las posibilidades de ratificación.
Finalmente, para que el dinero empiece a llegar a España hace falta que el gobierno presente (antes de abril) los llamados "planes de reformas", es decir, la planificación de lo que tiene previsto hacer con este dinero. Hay ciertas condiciones, como por ejemplo que estén destinados en un 30% a la transición verde y también a la digital. Pero el espíritu de este plan también es que los gobiernos reformen y modernicen su economía para corregir los problemas "estructurales" que se ven agravados por la pandemia. Y esta es una de las grandes polémicas en España porque dos de las peticiones sistemáticas de Bruselas a los gobiernos españoles son la reforma del sistema de pensiones y del mercado laboral. Justamente este viernes tendrá una lugar una reunión de los agentes sociales con el gobierno español, que se espera tensa por la propuesta del ministerio de Inclusión de alargar el cálculo de cotización de las pensiones.