Cataluña supera el crecimiento de la economía española en el 2023
La economía catalana creció un 2,6% el pasado año, una décima más que el conjunto del Estado
BarcelonaLa economía catalana cerró el 2023 con un crecimiento superior a la media española, según datos adelantados este miércoles por el Idescat, el instituto de estadística de la Generalitat.
En concreto, el producto interior bruto (PIB, el indicador que mide el tamaño de una economía) catalán aumentó un 2,6% el año pasado, una décima más que la tasa de crecimiento registrada por el conjunto del Estado de media el pasado año. Asimismo, España fue el país que más creció entre las grandes economías de la Unión Europea. Los datos publicados este miércoles por el Idescat son un anticipo de las cifras definitivas y más detalladas que el instituto estadístico publicará el 20 de marzo.
Para Josep Reyner, presidente de la comisión de economía catalana del Colegio de 'Economistas de Cataluña, la cifra del 2,6% representa "un retorno a la normalidad", después de un 2022 "anormal", con un incremento medio del PIB del 5,5%, fruto todavía de la aceleración económica derivada de la recuperación pospandemia. El 5,5% fue también el crecimiento del conjunto de la economía española durante ese año.
Pese a la normalización de las tasas de crecimiento de 2023, Reyner ve difícil que "se pueda mantener" el mismo ritmo este año, sobre todo debido al "contexto global", marcado por las guerras en Ucrania y Gaza, la disrupción del comercio internacional por los ataques de los rebeldes houthis en el mar Rojo y la lenta evolución de la economía china, entre otros elementos desestabilizadores. En este sentido, la mayoría de organismos internacionales apuntan a una moderación del crecimiento de la economía española hasta una tasa entre el 1,5% y el 2% este año, una cifra esperable también para la economía catalana.- _BK_COD_ La industria supera las expectativas
El pasado año los servicios fueron el principal motor de crecimiento de la economía catalana, con un incremento del 3,1% de la actividad respecto a 2022. Este sector representa más de dos tercios del PIB catalán. Sin embargo, esta cifra no es ninguna sorpresa, ya que el grueso de los servicios ya fueron mostrando un buen comportamiento a lo largo de todo el 2023, sobre todo el turismo, uno de los subsectores con más peso: "Ha sido un año bueno para el turismo ", confirma Reyner.
Sin embargo, a nivel catalán y español, en 2023 también ha destacado por la creación de empleo y el crecimiento de puestos de trabajo en el sector servicios de mayor valor añadido, sobre todo en tecnología. El Idescat destaca que "hay que remarcar el crecimiento de actividades como los servicios técnicos de arquitectura e ingeniería, el comercio al por menor, los servicios informáticos, las actividades jurídicas, el transporte aéreo y las demás actividades profesionales, científicas y técnicas".
En cuanto a la industria, después de un 2022 con decrecimiento, ha recuperado terreno con un incremento superior a la media del país, del 2,8%, mientras que la construcción creció una décima por debajo, un 2, 5%.
El crecimiento de la actividad industrial es "la nota más positiva" de los datos adelantados este miércoles, señala Reyner. El economista asegura que este "empuje" de la industria "no formaba parte del guión previsto" para este año, pero que la recuperación del sector de la automoción –muy potente en Catalunya– y de otras industrias punteras ha reactivado el conjunto del sector, en particular en los dos últimos trimestres del año.
La crisis del sector primario
Las cifras que ha dado a conocer el Idescat vuelven a confirmar la crisis del sector primario catalán, justamente en un día en que el campesinado del país continúa sus protestas por los problemas que arrastra desde hace años. La actividad económica en la agricultura, la ganadería y la pesca catalana se derrumbó el pasado año un 17,6% respecto a un año antes, una bajada que se suma a la del 13,9% registrada en 2022.- _BK_COD_ De hecho, desde 2018 el sector primario catalán sólo ha crecido ese año y 2021, con incrementos del 2,2% y del 0,5%, respectivamente, insuficientes para compensar las caídas de otros años. En 2019 y 2020 la disminución también fue contundente, del 4,5% y del 9%, respectivamente. "El sector agrícola está sometido a unas presiones brutales", recuerda Reyner, quien, en referencia a las protestas de los campesinos, apunta que "lo que está ocurriendo estos días es un reflejo" de varios años de fuertes caídas de la actividad.- _BK_COD_
