El coste de la deuda británica se dispara a niveles de 2008
La libra cae a su menor valor respecto al dólar desde el año 2023
LondresRechazada para el ministerio de Economía británico, que no logra poner la proa hacia el crecimiento y la bajada de la inflación. Mientras que la libra ha caído este jueves a su valor más bajo frente al dólar desde 2023 (1.224, antes de recuperarse hasta 1.228), el coste de la financiación de los bonos a diez años se ha elevado a cotas que no se veían desde la crisis financiera de 2008, con el rendimiento situándose en el 4,93%, en el pico más alto de la jornada, por caer esta noche al 4,8%.
En medio de llamadas a la ministra del ramo, Rachel Reeves, de suspender el viaje que hace a China este fin de semana, su número 2, Darren Jones, ha tenido que comparecer de urgencia en el Parlamento para garantizar que el gobierno sigue comprometido con su plan de estabilización fiscal, y que no pretende saltarse sus propias reglas autoimpuestas. En resumen, que no se endeudará más para financiar el gasto del día a día, y que sólo lo hará para proyectos de inversiones a medio y largo plazo.
La intervención de Jones en los Comunes ha tenido lugar después de que el presidente de la Cámara, Lindsay Hoyle, aceptara una pregunta urgente de la oposición conservadora relativa a la "presión creciente sobre las finanzas públicas a causa [del aumento] de los costes de los préstamos". Los tories tratan de someter a un sitio furioso por tierra, mar y Twitter/X el gobierno de Keir Starmer. Y si desde el 1 de enero el tema clave para erosionar la maquinaria de Downing Street han sido las infundadas denuncias, con Elon Musk a la cabeza, de permisividad del premier frente a redes de pedófilos que abusaban de chicas en distintas ciudades del país mientras fue fiscal de la Corona (2008-2013), las dificultades económicas del país han concentrado en las últimas horas las razones de los ataques.
Unos ataques que tienen en el aumento de impuestos de la Seguridad Social a partir de abril uno de los grandes caballos de batalla de la derecha y la extrema derecha, justo en el momento en que a causa del epidemia de gripe de la última semana del 2024 y los primeros días del 2025, la situación de muchos hospitales está llegando al colapso, con más de 4 horas de espera para que los pacientes sean atendidos en las emergencias.
Momento delicado
Algunos economistas creen que la ministra Reeves se encuentra en una situación de gran debilidad y si los elevados costes de la deuda persisten, el Tesoro deberá subir más impuestos o aplicar medidas de austeridad para servicios esenciales, hecho que sólo añadiría dolor y sufrimiento en un país que, en la práctica, las ha sufrido desde la mencionada crisis financiera del 2008. Reeves, sin embargo, se ha comprometido a no subir más impuestos y, si fuera necesario, recortaría gasto en servicios. Una política que impactaría en las clases populares y que sería aprovechada tanto desde la derecha –que ha castigado a los servicios públicos durante 14 años de gobiernos: 2010-2024– como desde la extrema derecha, al alza en todo el mundo , también en las islas.
La última vez que Reino Unido hizo frente a una crisis similar fue en el 2022, cuando la entonces primera ministra, Liz Truss, provocó la volatilización de miles de millones de libras de los fondos de pensiones a raíz de su minipresupuesto , que incluía recortes fiscales no financiados (abolición del tipo máximo del 45% del impuesto sobre la renta y revocación de los aumentos del impuesto de sociedades previsto) y un endeudamiento importante sin un plan fiscal claro. Los inversores perdieron la confianza en la capacidad del gobierno del Reino Unido para gestionar la deuda, lo que provocó una venta masiva de bonos gubernamentales, lo que disparó el coste del endeudamiento y propició la intervención de urgencia del Banco de Inglaterra. Sin embargo, los expertos de la City consideran que la situación no es, ni de lejos, como la de entonces.