El Procicat avala la vuelta progresiva al trabajo presencial

BarcelonaEl Procicat ha aprobado este viernes una nueva resolución que entrará en vigor el lunes y que recomienda a las empresas tanto públicas como privadas que adopten medidas para volver progresivamente al trabajo presencial. Aún así, también las insta a fomentar el teletrabajo cuando sea posible. Cae, pues, la obligatoriedad de limitar la movilidad laboral. El conseller de Salud, Josep Maria Argimon, ya había avanzado esta medida a primera hora en una entrevista a RAC1 y ha explicado la intención del gobierno catalán "de arreglar" el teletrabajo. Así pues, el Procicat ha acordado prorrogar el grueso de las medidas de contención contra el covid-19 en su nueva resolución al menos hasta el 12 de julio, ante el auge de contagios de las últimas semanas, sobre todo entre los jóvenes.

El aval a la vuelta al trabajo presencial también afectará a partir del lunes a los trabajadores de la administración de la Generalitat. Según se trató en una reunión con los sindicatos de la Función Pública, se volverá progresivamente a la presencialidad hasta septiembre. La propuesta del Govern es que los trabajadores públicos que puedan hagan dos días de teletrabajo y tres presenciales. La secretaría de Administración y Función Pública dictará una instrucción para regular las nuevas medidas organizativas y de prevención y seguridad, de forma que se permita la vuelta a los lugares presenciales de trabajo, pero manteniendo, a la vez, el trabajo remoto.

A pesar del inicio de la campaña de vacunación, el teletrabajo ha resistido durante el último medio año como una modalidad ya consolidada en muchas empresas. Según datos del Observatorio Nacional de Tecnología y Sociedad, que depende del ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital, durante el primer trimestre de 2021 en Catalunya el 15% de los empleados siguieron haciendo su trabajo desde casa. Es la segunda comunidad autónoma donde más se teletrabaja, después de Madrid, con un 21%, y se sitúa por encima de la media española del 11%. En cifras absolutas, en el Estado optaron por esta fórmula 2.146.000 personas entre enero y el marzo, coincidiendo con el repunte de casos de covid de principios de año y las medidas de restricción a la interacción social que se impusieron.