Barcelona+B es una alianza multisectorial que reúne a empresas, instituciones educativas, entidades sociales y administraciones para transformar Barcelona en una ciudad más sostenible, inclusiva y regenerativa. Impulsada por los socios estratégicos B Lab Spain, EADA Business School, Ferrer y el Ayuntamiento de Barcelona –a través de Barcelona Activa–, Barcelona+B quiere posicionar a Barcelona como una ciudad referente a escala mundial en la contribución a los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) desde un ámbito local. Para ello, trabaja con tres grandes líneas de acción: promover modelos empresariales de impacto, fomentar la colaboración entre empresas e instituciones para dar respuesta a los retos urbanos, y activar la participación ciudadana para afrontar los objetivos de la Agenda 2030.
Los jóvenes barceloneses entienden la sostenibilidad, pero no la ponen en práctica
Las conclusiones del estudio Eduquem+B muestran comprensión y una actitud muy positiva de los estudiantes hacia la sostenibilidad, pero sólo un 42% manifiesta su intención de actuar
Barcelona quiere ubicarse como una ciudad referente en materia de sostenibilidad. Y para ello, Barcelona+B asegura que es necesario empezar por las escuelas. Con esta premisa nace el proyecto Eduquem+B, un programa que ha encuestado a más de 2.000 estudiantes de 29 centros educativos de la ciudad para saber si la juventud está preparada para afrontar los retos ambientales y sociales del presente.
La iniciativa, impulsada por Barcelona+B con el apoyo académico de EADA Business School, parte de un test innovador, Be Ready for Now, basado en el marco europeo de competencias GreenComp. El objetivo es claro: diagnosticar qué saben los jóvenes sobre sostenibilidad, cómo actúan y qué habilidades necesitan desarrollar para convertirse en agentes reales de cambio.
Formar y sensibilizar a los centros educativos, la base para actuar
El diagnóstico evidencia que los estudiantes muestran una actitud muy positiva y un buen nivel de comprensión frente a las problemáticas ambientales. Destacan en pensamiento sistémico (69,1%) y en promoción de la naturaleza (60,6%). Sin embargo, sólo el 42,8% manifiesta su intención de actuar a favor de la sostenibilidad, especialmente en el ámbito colectivo y político.
Esta contradicción preocupa a las impulsoras del proyecto. "Los jóvenes entienden la naturaleza compleja de los problemas, pero no saben actuar de forma sistémica; no actúan en grupo ni movilizan a los demás", explica la directora de Sostenibilidad en EADA Business School, Federica Massa-Saluzzo. Recuerda que, históricamente, han sido los jóvenes quienes han impulsado las grandes transformaciones sociales y, por eso, considera "preocupante" la baja participación cívica detectada. "Creemos que una buena formación y sensibilización en los centros educativos podría cambiar esta base de actuación", afirma, por su parte, la directora de Barcelona+B en B Lab Spain, Elena Damiá.
Otra conclusión de peso es que los estudiantes asocian la sostenibilidad, sobre todo, con la gestión de residuos o los impactos ecológicos. Pero la dimensión social como la desigualdad o las condiciones laborales queda mucho más desdibujada. Según Massa-Saluzzo, esto no es responsabilidad sólo de los jóvenes: "Esta falta de visión sistémica es el reflejo de la sociedad en la que vivimos. El concepto de sostenibilidad social y ambiental no está suficientemente presente en la educación ni en la cultura en general".
Acercar la sostenibilidad a las aulas ya las empresas
El proyecto Eduquem+B forma parte de uno de los tres ejes de Barcelona+B, iniciativa impulsada por Ferrer, EADA y B Lab Spain, que quiere conectar empresa, educación y ciudadanía para acelerar la transición hacia una ciudad más inclusiva y responsable a nivel ambiental. Los tres pilares básicos de trabajo son: transformación empresarial, colaboración entre empresas y entidades para crear soluciones de alto impacto y educación para la sostenibilidad, donde se enmarca Eduquem+B.
El estudio se ha convertido en el punto de partida para iniciativas educativas y colaboraciones con empresas. "Si un joven llega a una empresa con formación en sostenibilidad, su integración y capacidad de transformación es mucho más directa", defiende Massa-Saluzzo.
Recursos y formación para el profesorado
Durante la prueba piloto, los centros han recibido materiales de base para trabajar resultados con el alumnado. El siguiente paso del programa es reforzar esta formación docente con herramientas más profundas pero prácticas y accesibles. La respuesta de los centros, explican las impulsoras, fue "muy positiva". Profesores y coordinadores han abierto sus puertas y expresado su interés por seguir formándose para poder "educar con más criterio en el aula".
Barcelona como laboratorio de cambio
Eduquem+B no busca sólo sensibilizar, sino capacitar a los jóvenes para que sean protagonistas del cambio que reclama la ciudad. Por eso, subraya Elena Damiá, es necesario estimular la curiosidad, el sentido crítico y la iniciativa: "Que no se queden sólo con lo que ven en las redes, sino que sean exploradores, inquisitivos y que piensen antes de actuar".
Desde Barcelona+B se hace un balance claro: hay base, interés y sensibilidad, pero ahora el reto es transformar el conocimiento en acción colectiva real. Y esto, señalan, sólo será posible si la educación, las empresas y las instituciones andan juntas.
