No cierres el huerto en agosto: consejos para cuidarlo y disfrutarlo
Desde el sombreado hasta el riego por goteo, te damos las claves para mantener la actividad de tu huerto durante los meses más calurosos
BarcelonaUn pequeño balcón, espacios donde caben cuatro macetas e, incluso, los rincones más estrechos pueden convertirse en un huerto. No hace falta ser campesinos para conseguir cosechar tomates propios y otras hortalizas llenas de vitaminas y energía. Ahora que el calor está plenamente instalado y los días son largos, hay hierbas aromáticas y las verduras alcanzan su máximo esplendor en los balcones, terrazas y patios de muchas casas, donde se cultivan toda clase de plantas, por mucho que sea en cosechas reducidas. Un test, un poco de sol y, sobre todo, ganas de ensuciarse del suelo, basta para cosechar verdura ecológica hecha en casa.
Variedades veraniegas
Las variedades que puedes cosechar en pleno mes de agosto son diversas. Según el Calendario de siembra y plantación para la zona del litoral catalán, del libro Un huerto para ser feliz, de Marc Casabosch, hay opciones de todo tipo: desde la berenjena, el pepino y el calabacín hasta la judía, la patata y el apio. Las variedades de reducidas dimensiones ofrecen opciones muy interesantes. Sin duda, uno de los reyes de la corona son los tomates, especialmente los charles y los tipos pera. Estas variedades de la fruta –sobre todo la segunda– son ideales para macetas profundas.
También son exitosos los cultivos de albahaca, perejil y menta, tres hierbas con amplias posibilidades culinarias y decorativas. Aún quedan semanas de calor y esta clase de plantas agradecen las elevadas temperaturas.
Por otro lado, los que desean mayor intensidad en la mesa están a tiempo de cosechar pimientos y guindillas, unas plantas que también agradecen la bondad meteorológica que proporciona el verano.
Igualmente, son muy interesantes las variedades rápidas de las lechugas, que se pueden cosechar en un mes y nos permitirán poner en la mesa ensaladas variadas. Se trata de plantas que agradecen el sol directo –de hecho, requieren más de cinco horas diarias–, y sobre todo que no piden grandes porciones de suelo para desarrollarse de forma satisfactoria.
Finalmente, para aquellos que tienen más ganas de plantar que cosechar, agosto también es un mes de mirar adelante. Según el calendario de siembra, es la hora de plantar brécol y coliflor, que podrán tener en la mesa en tres o cuatro meses. En septiembre, ya podrá empezar la plantación de los calçots, cebolletas y habas.
Espacio mínimo necesario y orientación
Aunque parezca poco, en un metro cuadrado de balcón se pueden cultivar diversas especies combinadas, siempre que se elijan bien las bases. En caso de que podamos elegirla, la orientación ideal de la plantación es la sur, y las plantas siempre pueden adaptarse a orientaciones oeste y este. Hay que tener una visión de conjunto y colocar las plantas más altas, como el tomate, en el fondo, y dejar frente a las más bajitas, como las aromáticas y los pimientos.
Recipientes y sustrato
Si el trasplante se hace ahora, es necesario poner las plantas en macetas profundas de al menos treinta centímetros para las plantas más exigentes, como los tomates y los pimientos. También se pueden utilizar jardineras, cajas y recipientes reciclados más pequeños con agujeros para el drenaje, especialmente indicadas para hierbas y lechugas. Incluso se pueden instalar huertos verticales en paredes o pequeños recipientes. Actualmente, en las redes sociales existen muchas ideas para convertir en un test cualquier tipo de bote. Se recomienda poner siempre un sustrato rico en compost y no reutilizarlo.
Riego y mantenimiento en pleno verano
Seguramente, el mayor reto de tener un huerto es mantenerlo en vida en pleno calor, cuando el sol y el calor todo lo secan. El agua es la clave de este sostenimiento, pero se asocia a menudo con la necesidad de estar encima, especialmente cuando las macetas son pequeñas, tienen una alta exposición al sol y se secan con facilidad. Para mantener la planta en buenas condiciones y asegurar una humedad constante, es necesario regarla a primera hora de la mañana o al anochecer y, preferentemente, por goteo doméstico, un método preferible al riego con manguera por inundación. Para prevenir hongos, es necesario mojar directamente la tierra, dejando fuera de la ecuación las hojas. Aquellos que estén fuera de vacaciones algunos días durante agosto, deben dejar el riego muy bien asegurado, por ejemplo, utilizando botellas invertidas con pequeños agujeros.
Tomates, el clásico
Para conseguir tener tomates en el balcón es necesario saber unas cuantas cosas relativas a esta fruta con tanta expansión mediterránea. En primer lugar, hay que plantarlo en la maceta más profunda que se pueda y con el sustrato más rico posible. Comprar humus de gusano es una excelente opción para invitar a la planta a producir. De hecho, el abono es un factor clave en esta planta: es necesario hacerlo cada quincena para garantizar su explosión en flores y frutos. Es cierto el tópico de que "si le damos, nos da", y si lo mantenemos así durante toda la etapa productiva, dará frutos de forma abundante y satisfactoria. En segundo lugar, la plantación de tomates no se entiende sin un "tutor", que puede ser un mástil o caña, y que sirve para acompañar y guiar su crecimiento hacia arriba. Este objeto evitará que las piezas de fruta acaben por el suelo y se estropeen. Para favorecer la fructificación, también es necesario retirar y pinzar las ramas bajas y los brotes laterales, de forma que sólo las partes que seleccionemos produzcan frutos. De hecho, dejar sólo los brotes principales en la planta hará que logremos "mejores frutas, mayores y una producción más avanzada", asegura Íñigo Clemente, experto en semillas de la Asociación Española de Centros de Jardinería.
Riega a primera hora.La mejor hora es antes de las 8 h de la mañana o después de las 20 h, cuando el sol ya no evapora rápidamente el agua y las plantas pueden aprovecharla mejor. Esto evita quemaduras en las hojas y derroche hídrico.
Utiliza riego por goteo o botellas invertidas.Instalar un sistema de riego por goteo es ideal para huertos urbanos. Esto asegura un riego lento y constante, incluso cuando estás afuera unos días.
Aplica una capa de cobertura.Cubrir la tierra con cobertura omulching(paja, corteza triturada u hojas secas) ayuda a mantener la humedad del suelo, reduce la erosión y evita que crezcan malas hierbas. Además reduce el calentamiento excesivo de las raíces.
Protege las plantas del sol directo.Utiliza telas de sombreado, cortinas ligeras o incluso sombrillas para proteger las plantas más delicadas. El sol de verano puede quemar las hojas de tomates, fresas y lechugas, especialmente en zonas muy expuestas.
Elimina flores y brotes débiles.Para mantener la energía de la planta en pleno verano, elimina flores secas, brotes débiles u hojas amarillas. Esto permite concentrar el esfuerzo de la planta en frutos sanos y evita enfermedades por acumulación de humedad.
Vigila las plagas con insecticidas naturales.El calor y la humedad favorecen la aparición de pulgones, mosca blanca o hongos. Prepara remedios naturales como jabón potásico, infusión de ajo o vinagre diluido. Revisa a menudo el reverso de las hojas.
Mueve las jardineras para adaptarlas al sol.En caso de que sea posible, es conveniente cambiar ligeramente la ubicación de las macetas o jardineras para que reciban la cantidad justa de sol. Las plantas que reciban demasiado pueden sufrir y las que estén en la sombra pueden no prosperar. Es necesario encontrar un equilibrio adaptado a cada especie.
Evita plantar en días de máximo calor.Si tienes que trasplantar o sembrar, hazlo después de un día de lluvia oa primera hora de la mañana. Las plantas trasplantadas necesitan adaptarse y el exceso de calor puede perjudicar el arraigo. Los resultados serán mejores si los días siguientes son frescos o nublados.