Carmen Cervera pisa por fin su futuro museo: "Es el legado que dejaré en Barcelona"

BarcelonaEntre carteles de "Se vende" y "Se alquila", la baronesa Thyssen-Bornemisza, Carmen Cervera, ha pisado este jueves el museo que llevará su nombre al centro de Barcelona. La coleccionista ha asistido a la primera intervención artística efímera que se ha realizado en el emblemático Cine Comedia, el Palau Marcet, el lugar donde se ubicará el futuro Museo Carmen Thyssen Barcelona.

Cervera ha explicado que el nuevo equipamiento "avanza". Las obras empezarán en 2026 y se abrirá en 2028. "Es el legado que dejaré en Barcelona. Es mi ciudad, y la quiero mucho", ha dicho. Cervera también ha subrayado que existe buena sintonía con el Ayuntamiento y ha mostrado su agradecimiento al alcalde Jaume Collboni. "Todos los museos de Barcelona nos están ayudando y estamos muy unidos para que sea un éxito", dice.

Parece que el equipamiento combinará grandes obras con talento emergente. El protagonismo lo tendrá "obra consagrada" de los siglos XIX y XX, en especial la pintura modernista y noucentista –Ramon Casas, Eliseu Meifrèn y Santiago Rusiñol, entre otras piezas de la baronesa– pero habrá otras propuestas firmadas por artistas más jóvenes, algunas relacionadas con el ámbito digital. "Hay un sinfín de posibilidades expositivas", decía Guillermo Cervera, sobrino de Carmen Cervera. "No se puede triunfar internacionalmente si no se hace primero en el ámbito local, eso debemos tenerlo todos claro", decía.

Cerca de un centenar de estudiantes de una decena de escuelas de arte y diseño como Llotja, Elisava, Massana, IDEP y EINA, han transformado colectivamente las 500 butacas del espacio para despedir el antiguo cine, cerrado en enero del 2024.como el diseñador Jordi Labanda, los chefs Carme Ruscalleda y Raül Balam, el artista TVBoy, el diseñador Javier Mariscal, el bailarín Julio Bocca y la modelo Judit Mascó para que den ideas creativas a los jóvenes estudiantes.

No pierde el apellido

La baronesa ha tenido que desmentir las últimas horas que haya perdido el título de baronesa y el apellido Thyssen-Bornemisza por no haberse renovado el pasaporte suizo: "Son tonterías. Es algo que se han inventado y no sé por qué, siempre seré la mujer y la viuda de mi marido," y lo seré toda la vida. La aristócrata vivió durante años en Lugano, pero en el 2014 ya se vendió la residencia heredada por parte del barón Heinrich Thyssen-Bornemisza, Villa Favorita. La baronesa ha afirmado que no quería pagar impuestos a varios países cuando su residencia oficial se encuentra en Andorra.

Una de sus hijas gemelas, Carmen, le ha acompañado en el acto de Barcelona y ha dicho que participará del proyecto. La joven, de diecinueve años, se ha trasladado a vivir a la capital. Estudia derecho en la Universidad Internacional de Catalunya y vive en un piso en Sarrià. También estaba el sobrino, Guillermo Cervera, y el managing director de Stoneweg Plazas & Experiences, Juan Manuel Sevillano