"Eran épocas de mucha ilusión, de estar con las amistades, de luchar por medallas"

Barcelona"Los mejores veranos fueron los de los campeonatos europeos de formación de la selección, por las compañeras con las que los compartí y por lo que se logró. Eran épocas de mucha ilusión, de volver a ver las amistades, de luchar por medallas", explica Ainhoa ​​López, jugadora del Spar Girona. López pasó en junio de los 17 a los 20 años entrenándose con sus compañeras para después enfrentarse a una competición europea o mundial.

"Éramos la generación del 97. Quedamos campeonas en U18 y U20 y subcampeonas del mundo en U17. Fuimos una generación de éxito, dimos muchas alegrías y guardo muchísimas amistades", explica la jugadora, que recuerda cómo defendió la camiseta y cómo fue las que están en primera o segunda división. Aún tiene presente los nervios de la primera vez y los viajes en avión todas juntas. De vuelta, lo celebraban en el avión con los pilotos y, después, iban a cenar con sus familias. "Había mucha convivencia", recuerda López, quien siente que lo valora mucho más con la perspectiva que le da el paso del tiempo.

Dedicar el tiempo libre del verano a entrenarse está lejos de lo que cabría esperar habitualmente de una adolescente, pero era lo que más le apasionaba. "Eres muy joven y quieres el máximo. El deporte para nosotros lo era todo. Obviamente, siempre que haces unas cosas pierdes otras. También mucha gente no deportista se pierde lo que nosotros vivimos. Es cuestión de prioridades", afirma la jugadora, consciente de los valores que le ha transmitido el deporte.

"La persona que soy ahora es gracias a estas experiencias y lo que me ha dado el baloncesto ya vivirlo con estas compañeras. De las derrotas, siempre se aprende. De las victorias, también. Todo lo que vivo en el ámbito deportivo se traslada a la vida real", concluye.

Durante las concentraciones, sin embargo, las jugadoras encontraban también el tiempo para descansar y disfrutar del verano. En este sentido, recuerda que los campeonatos siempre coincidían con su cumpleaños y el de Maite Cazorla, y que lo celebraban juntas con todo lo demás. También rememora el campeonato de Europa U18 de 2015 en Celje, Eslovenia, donde la selección española se llevó la medalla de oro. En el hotel donde estaban las jugadoras, había un parque acuático con toboganes. "Recuerdo ese día en las piscinas. Es verano. Intentas desconectar un poco y, al mismo tiempo, conectar unas con otras", añade.