Jamie Lee Curtis critica la cirugía estética y denuncia que la hizo adicta al Vicodin

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Jamie Lee Curtis en una imagen de archivo

BarcelonaJamie Lee Curtis se ha declarado públicamente en contra de la cirugía estética. En una entrevista publicada hace poco por Fast Company, la estrella de Halloween ha dado su opinión sobre la cirugía plástica y sobre los estándares de belleza modificados que imperan en Hollywood actualmente. "Probé la cirugía plástica y no funcionó. Me hizo adicta al Vicodin", explica Curtis, que añade que ya lleva "22 años sobria". "La tendencia actual de rellenos, y esta obsesión por los filtros, y las cosas que hacemos para ajustar nuestra apariencia a las necesidades de Zoom están acabando con generaciones de belleza", dice la actriz, de 62 años, que añade que "les redes sociales son un peligro real para los jóvenes".

"Cuando te estropeas la cara no puedes recuperarla", asegura la artista sobre el peligro de entrar en un quirófano sin saber con seguridad cómo saldrás. "Es como darle una motosierra a un niño pequeño. Simplemente no conocemos el efecto mental, espiritual y físico en una generación de jóvenes que sufren debido a las redes sociales, debido a las comparaciones con otros. Todos los que tenemos suficiente edad sabemos que todo es mentira", proclama la actriz, que declara que hace un uso quirúrgico de las redes sociales. "Utilizo las redes sociales para vender y amplificar las cosas que me importan. Punto. El resto es cáncer. Nunca he leído ni un comentario", concluye al respecto.

Curtis explicó en 2019 a Variety que se había hecho una "cirurgia de rutina" después de que un cámara dijera ante ella: "No la pienso grabar, hoy. Tiene los ojos demasiado hinchados". Según la actriz, aquello la marcó lo suficiente como para hacerle tomar una decisión que se demostraría completamente errónea. "Estaba tan mortificada y tan avergonzada y sentía tanta vergüenza que después de aquella película me sometí a una cirugía plástica de rutina para eliminar el abultamiento", explicó Curtis, que había tenido los ojos hinchados siempre, y no por la edad. "Me dieron Vicodin como analgésico para aquello, que no era tan doloroso", asegura sobre el origen de su adicción a esta sustancia opioide derivada de la codeína. Curtis, que tiene dos hijos, fue adicta a esta sustancia a lo largo de diez años durante la década de los noventa.

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