La reina saluda sentada: ¿qué ocurre con los pies de Leticia?

BarcelonaGuillermo de los Países Bajos, de pie; Máxima de los Países Bajos, de pie; Felipe, de pie, pero Leticia, sentada. Este miércoles se ha hecho viral un vídeo donde se ven a las dos parejas reales haciendo una recepción en el Palau de la Zarzuela. La escena no debería haber tenido nada de excepcional más allá de la asistencia de los reyes holandeses a la corte española, pero la lacra que lleva tiempo persiguiendo a Letizia se ha llevado todo el protagonismo. Si bien la reina no ha anulado ningún acto por esta enfermedad, no todo el mundo entiende la forma que tiene de resolver este inconveniente.

En un día en que debían lucirse todas las galas, Letizia ha aprovechado la falda larga del vestido que requería la ocasión para tapar la silla alta que se ha utilizado para mantener a la reina sin apoyar los pies en el suelo y poder saludar durante cuarenta minutos a todos los invitados con una relativa normalidad. Este recurso y organización ya les anunció Zarzuela con antelación, previendo que podría suponer un impacto para los más fieles devotos a la liturgia monárquica. Algunas de las personalidades que han dado la mano en hilera india a Sus Majestades han sido Frenkie de Jong, Jordi Cruyff y Ronald Koeman y Susila.

Además, en el almuerzo posterior a la recepción de personalidades españolas y neerlandesas, Letícia ya estaba sentada en la mesa cuando han entrado Felipe y los reyes de los Países Bajos, evitando así que las cámaras pudieran captar las dificultades que tiene para andar. Este recurso ha hecho que algunos usuarios de las redes hayan ironizado con el libro que escribió Jorge Peñafiel, Los tacones de Letizia, u otros que han querido poner cucharada asegurando que es "una táctica más de dar la nota". En este caso Letizia ha sido el blanco tanto para los más republicanos como para los monárquicos más acostumbrados que ven en Letizia a una persona ajena a la institución de la Corona española.

¿Qué tiene en los pies Letizia?

Debido a todos los años que ha llevado zapatos de tacón alto durante largas horas y sin posibilidad de movimiento, Letizia ha desarrollado un neuroma de Morton en el pie izquierdo a más de una metatarsalgia. Ambas afecciones tienen que ver con inflamaciones: en el caso del neuroma de Morton, supone el engrosamiento de un nervio responsable de la sensibilidad de los dedos que puede llegar a ser muy molesto, y la metatarsalgia supone la inflamación de la zona del metatarso del pie.

A estas alturas la reina ya está siguiendo un tratamiento para evitar sufrir dolor en los ratos que está de pie y quieta. Lo que sí parece irrevocable es la posibilidad de que Letizia pueda volver a llevar zapatos de tacones altos, un tipo de zapatos que pese a la resistencia que opuso, hace unos meses acabó aceptando, por lo que ahora solo lleva zapatos planos.