El Brexit de nunca acabar: la UE activa la vía legal contra el Reino Unido por incumplir los controles aduaneros

BruselasParecía que sí, pero el Brexit no se acabó la noche de Navidad. El Reino Unido ha sido hasta ahora incapaz de poner en marcha los controles aduaneros en el mar de Irlanda a los que se comprometió cuando firmó el acuerdo de retirada de la Unión Europea. Además, ha alterado unilateralmente el acuerdo del protocolo de Irlanda para darse más tiempo, cosa que, según la Unión Europea, vulnera el pacto (que tiene estatus de acuerdo internacional) y también el compromiso de actuar de buena fe. Por eso, la Comisión Europea ha activado este lunes la vía legal contra el Reino Unido con la apertura de un proceso de infracción.

Que sería extremadamente complicado poner en marcha el protocolo de Irlanda no es ninguna sorpresa. Para evitar una frontera física entre Irlanda e Irlanda del Norte –y las importantes consecuencias políticas y sociales que esto tendría–, se acordó establecer controles aduaneros marítimos para los bienes que entran desde la Gran Bretaña hasta Irlanda del Norte, porque con el Brexit el Reino Unido quedó fuera del mercado único y la unión aduanera mientras se aceptaba que Irlanda del Norte se mantuviera dentro, pero poner en práctica esta complicada solución ha sido más difícil de lo que Boris Johnson se esperaba.

A principios de año, tanto Londres como el Reino Unido accedieron a la flexibilidad, vistas las circunstancias, y permitieron que los controles no entraran en vigor hasta el 1 de abril. Pero los propios trabajadores de los puertos y también la Asociación de Puertos británica han ido enviando mensajes de alarma las últimas semanas porque consideran que ni las instalaciones ni los empleados están preparados. Ahora, en un contexto además envenenado por los incumplimientos de la farmacéutica anglosueca AstraZeneca de entregar vacunas a la UE mientras cumple sus plazos en el Reino Unido, fondos comunitarias critican que Johnson haya actuado unilateralmente y sin atender las reclamaciones de Bruselas, que, vistas las intenciones del Reino Unido anunciadas el 3 de marzo, había pedido "respuestas" por la vía de una hoja de ruta sobre el calendario con el que Londres preveía cumplir el acuerdo que "nunca ha llegado".

Por eso, la Comisión Europea ha enviado esta misma tarde una carta de notificación de la apertura del procedimiento de infracción al gobierno del Reino Unido, que ahora tendrá un mes para responder. Después la Comisión puede decidir ir más allá si la respuesta británica no es satisfactoria. Este tipo de procesos de infracción son largos hasta que no llegan a los tribunales y, eventualmente, pueden acabar con una sanción en caso de que el juez decidiera que la Unión tiene razón y el Reino Unido todavía no hubiera puesto remedio.

Además, el vicepresidente de la Comisión Europea a cargo de las conversaciones con los británicos, Maros Sefcovic, ha mandado una carta a su homólogo británico en las negociaciones, David Frost, en la que pide al gobierno de Johnson que rectifique. "Las decisiones unilaterales y las violaciones del derecho internacional por parte del Reino Unido socavan la confianza mutua. El Reino Unido tiene que aplicar adecuadamente el acuerdo si queremos lograr nuestros objetivos", dice Sefcovic en un comunicado en el que, al mismo tiempo, expresa poder resolver el conflicto por la vía del diálogo sin llegar a los tribunales. "El Reino Unido no se tendría que sorprender", han dicho fuentes europeas después de recordar que no ha respondido a las reclamaciones de Bruselas.