El candidato proeuropeo gana las elecciones presidenciales en Rumanía

BucarestRumanía apuesta por la Unión Europea y Bruselas respira aligerada. El candidato prooccidental Nicusor Dan, alcalde de Bucarest desde 2020, será el nuevo presidente del país después de que haya logrado el 53,99% de los votos en la segunda vuelta de las elecciones, celebrada este domingo. El aspirante de la extrema derecha, el populista George Simion, quedó muy lejos, a casi 900.000 votos: obtuvo el 46,01% de los sufragios. La participación en esta segunda vuelta ha subido hasta el 64,5%, mientras que en la primera sólo alcanzó el 53%.

Las primeras palabras de Dan, cuando aún sólo se conocían datos de encuestas, han sido realistas, ofreciendo diálogo en todo el país: "Hoy ha ganado una comunidad rumana que quiere un cambio profundo, una comunidad que quiere reducir la corrupción, una sociedad de diálogo y no de odio. Tenemos que luchar por una sola Rumanía".

Como ya ocurrió hace dos semanas, la comunidad rumana afincada en España se ha inclinado mayoritariamente por Simion. Pero de nada le ha servido, porque estos resultados han sido compensados ​​por otros grupos de la diáspora, que han abrazado el ideario europeísta de Dan. Con todo, los datos totales de los expatriados (más de 1,2 millones de votantes) volvieron a dar la mayoría de las papeletas al populista Simion, que adelantó en más de 124.000 sufragios a los que, al final de la noche, fue el ganador.

En cualquier caso, el alcalde de Bucarest ha conseguido, en los últimos quince días, dar la vuelta a unos resultados que habían hecho temer lo peor en Bruselas, ya que Simion –un candidato trumpista al estilo de Viktor Orbán– obtuvo en la primera vuelta el 40,96% de los votos, mientras que Dan sólo tuvo un 20,99%. Su crecimiento ha sido espectacular y el entusiasmo de sus partidarios, que ondeaban banderas rumanas y de la UE, se ha hecho evidente en las calles de la capital, cuando el presidente virtual, ya con la victoria garantizada por los datos oficiales, ha salido a saludar al balcón de su cuartel general como independiente, el hotel Cismigiu.

Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea, ha felicitado esta noche a Nicusor Dan, ya que la victoria de Dan es el triunfo de la Europa de Bruselas. Los resultados oficiales han confirmado de forma bastante precisa los datos de las dos encuestas a pie de urna difundidas a las 21. electorales. Inicialmente, sin embargo, el aspirante extremista George Simion, en un discurso apasionado, había rechazado estos datos y había asegurado que sus sondeos le situaban por delante. De hecho, ha insistido publicando una declaración en X en la que decía: "Soy el nuevo presidente de Rumanía" pero ya europeas que, después, los datos oficiales han acabado confirmando.

Nicusor Dan, matemático de profesión, fue cofundador de la Unión Salvar Rumania (USR) y es el alcalde actual de Bucarest. Se presenta como un candidato proeuropeo avalado por una coalición de partidos centristas y liberales que quieren mantener a Rumania en la vía de la integración en la Unión. Dan apareció en la escena pública en el 2006 en movilizaciones contra la corrupción urbanística en la capital del país. Desde entonces ha ido ganando apoyo hasta llegar a ser el primer edil de Bucarest.

Su campaña se ha centrado en la lucha contra la corrupción y la reforma del estado. Defiende la transparencia institucional y el fortalecimiento del estado de derecho, con el objetivo de extender a todo el país los principios aplicados en Bucarest. Cuando ha votado en su ciudad natal, Fagaras, ha declarado: "He votado por mantener la orientación europea de Rumanía y por una cooperación sólida con nuestros socios europeos, en lugar de un camino que nos conduzca al aislamiento".

Basar la campaña electoral en las redes sociales, como ha hecho George Simion, ya había sido también la estrategia de Calin Georgescu en las elecciones del pasado noviembre. Y le sirvió para conseguir la victoria, aunque el Tribunal Constitucional del país la anuló. Según informes de los servicios de inteligencia y las pruebas judiciales, la candidatura de Georgescu la habían impulsado canales ilegales y escondía gastos de campaña. La extrema derecha lleva media docena de años centrando sus campañas en intentar captar el voto de la generación joven a través de redes sociales como TikTok. De hecho, casi el 90% de los jóvenes en Rumanía utilizan esta red entre 3 y 4 horas al día.

Simion, que había apoyado a Georgescu, dijo que, si ganaba, quisiera tenerlo en su gabinete. El candidato del AUR –oro significa oro en rumano– defendía una agenda basada en un nacionalismo radical, euroescéptico, con un conservadurismo profundo. Se había posicionado contra las políticas progresistas en cuestiones como los derechos LGTBI o la educación sexual, y ha dado un firme apoyo al trumpismo. Además, había declarado que quería implantar un modelo "al estilo Orbán" en Rumanía.