El metro de Moscú ya se puede pagar con la cara
El sistema de reconocimiento facial genera debate sobre el uso y abuso que se puede hacer
BarcelonaA partir de ahora, el metro de Moscú se pagará con la cara. Se ha instalado un sistema de reconocimiento facial en los accesos de las 240 estaciones de la red que permiten pagar el viaje con una simple mirada a cámara. El metro de Moscú es de los más utilizados del mundo con billones de usuarios al año. Esta nueva tecnología no solo facilita el trabajo a los ciudadanos sino que, además, pretende evitar que nadie se escaquee. Es el primer sistema sin efectivo, ni tarjeta, ni teléfono que se instala en el mundo y se denomina Face Pay.
Después de publicar un tuit en el que ha anunciado el inicio de la implementación del sistema, el alcalde de Moscú, Serguei Sobianin, ha explicado el funcionamiento: "Los pasajeros tendrán que vincular su fotografía, tarjeta bancaria y tarjeta de metro al servicio mediante una aplicación móvil". Desde el departamento de Transportes se espera que en los próximos tres años al menos un 15% de los usuarios usen Face Pay de manera habitual y de este modo se regule y agilice el movimiento en las horas punta. "Moscú es la primera ciudad del mundo en implementar Face Pay a gran escala. La tecnología es nueva y muy compleja, tendremos que continuar trabajando para mejorarla", explicaba el alcalde.
La prueba piloto empezó en julio de 2021 en una de las 15 líneas de metro y actualmente hay unos 20.000 usuarios registrados en el aplicativo.
El debate de la privacidad
Recientemente, también se ha ampliado el ya existente sistema de cámaras de videovigilancia en la calle, que ya cuenta con más de 175.000 dispositivos de reconocimiento facial. Son muchos los activistas que critican el abuso de esta tecnología y cuestionan el uso y abuso de los datos recopilados y la privacidad. El principal problema es "la falta de regulación, supervisión y protección de datos", tal como expuso la organización Human Rights Watch. Activistas de derechos humanos denunciaron que las cámaras se habían usado para identificar a manifestantes que habían acudido a las manifestaciones en defensa de Aleksei Navalni. Durante el confinamiento estricto de dos meses que se hizo por la pandemia a principios de 2020, las cámaras de videovigilancia sirvieron para procurar el cumplimiento de las medidas establecidas.