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Cate Blanchett, diana de una venganza adictiva

La actriz australiana protagoniza 'Observada', la primera serie de Alfonso Cuarón

BarcelonaLa pose elegante y casi aristocrática de Cate Blanchett le va como anillo al dedo a Catherine Ravenscroft, la protagonista de Disclaimer (Observada), la primera serie de Alfonso Cuarón, que se estrena este viernes en AppleTV+. Siempre segura de sí misma, al menos aparentemente, Ravenscroft es una reconocida documentalista a la que llueven los premios y que vive en una impresionante casa en el centro de Londres. La perfección que proyecta empieza a resquebrajarse cuando un día recibe en casa un libro escrito con seudónimo y que claramente está inspirado en ella. Para que no quede ninguna duda de que está basado en un secreto de su pasado, en la primera página del libro se puede leer la siguiente advertencia: "Cualquier parecido con personas vivas o muertas no es una coincidencia".

La obsesión de Catherine es descubrir quién ha escrito el libro, pero el espectador lo sabe desde el primer minuto: un profesor de Cambridge ya jubilado que considera a la periodista responsable de la desgracia personal más importante de su vida. Adentrándose en la última etapa de su vida, el hombre, interpretado por Kevin Kline, tiene el objetivo de infligir el máximo daño a Catherine y su familia, formada por su marido Robert (Sacha Baron Cohen) y su hijo Nicholas (Kodi Smit-McPhee).

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Cuarón, cinco veces ganador del Oscar, escribe y dirige esta historia que se cuenta a través de diferentes puntos de vista y que se basa en una novela homónima de Renée Knight. Para el mexicano la trama permite explorar la tendencia humana a juzgar a los demás. "Hay una especie de placer al juzgar y criticar a los demás. Lo podemos ver actualmente en cómo la gente sube rápidamente al carro. Nos hace sentir superiores y algo más cómodos con nosotros mismos. Como si pensáramos que siempre hay alguien que es algo peor que nosotros", explica el cineasta.

El gran temor de Catherine es que sus secretos salgan a la luz pública y pierda todo el respeto profesional y social que ha ganado con su trabajo. "Lo que está claro es que Catherine es una mujer muy inteligente y sofisticada, pero también ha aprendido a llevar máscaras: una máscara con la familia, una máscara con su trabajo, pero también una máscara con la sociedad en general –dice Cuarón–. Y cuando llevas una máscara, la máscara es sólo la parte exterior. Lo importante es la persona que hay dentro.