La miniserie de mafia que hará las delicias de quienes añoran 'Los Soprano'

BarcelonaLas series relacionadas con universos de superhéroes generan anticuerpos a muchos espectadores. Así pues, el primer detalle a tener en cuenta cuando se habla deEl Pingüino, la miniserie que Max estrena este viernes, es que es más una ficción de mafiosos al estilo de Los Soprano que el enésimo intento de estirar el chicle del mundo de Batman. Sí, el protagonista es el malvado de los cómics de DC, pero el justiciero alado no aparece por ninguna parte y no se le menciona y, de hecho, el motor de la ficción es la guerra abierta entre las distintas familias mafiosas de la ciudad de Gotham , trasunto de Nueva York.

Después de The Batman, el irlandés Colin Farrell se vuelve a transformar en Oz Cobb, más conocido como el Pingüino. La palabra "transformar" es clave porque es imposible reconocer a Farrell bajo las prótesis y el maquillaje que luce y que ha creado Mike Marino. Tampoco se le puede identificar a través de la voz: si se miran los capítulos en versión original el característico acento irlandés del actor ha dejado paso al deje neoyorquino. "Me miraba en el espejo y la imagen que veía no era yo", confiesa Farell, quien explica que, a excepción de sus manos, todo su cuerpo está cubierto por maquillaje o prótesis. El actor detalla que para lograr transformarse en el personaje todos los días se sometía a sesiones de cuatro horas de maquillaje.

La contrincante

En un Gotham en horas bajas después de las inundaciones que han dejado parte de la ciudad totalmente destruida, el Oz pone en práctica sus artimañas para ascender dentro del mundo criminal. En su misión le acompaña un adolescente, Victor (Rhenzy Feliz), proveniente de la parte más pobre de la ciudad, que se convierte en su chófer. Como Tony Soprano, uno de los puntos débiles del protagonista deEl Pingüino es su madre, una mujer afectada por una demencia y obsesionada con conseguir que su hijo sea el dueño de la ciudad.

Para conseguir el objetivo materno, deberá imponerse a una enemiga inesperada, Sofía Falcone, hija de su difunto antiguo jefe y hermana de Alberto Falcone, el heredero recientemente asesinado. La princesa de la mafia, interpretada por una fascinante Cristin Milioti, acaba de salir del psiquiátrico en el que ha permanecido encerrada durante diez años después de que le dieran los crímenes cometidos por su padre. Aparte de arrastrar una buena dosis de trauma, está decidida a descubrir quién ha matado a su hermano, con quien tenían acordado dirigir juntos a la mafia de la ciudad. Imprevisible y sin miramientos, hará todo lo posible por ser ella quien gobierne el crimen de Gotham.

Lauren LeFranc, showrunner de la miniserie, ha explicado que a la hora de imaginarse el personaje de Sofía Falcone cogió como referencia a Rosemary Kennedy, la hermana del presidente John F. Kennedy que, a los 23 años, fue sometida a una lobotomía que la dejó incapacitada de por vida. "Pensé en ella porque, como Sofía, venía de una familia muy destacada y adinerada, y su padre la ingresó en una institución mental, y realmente no sabemos mucho su historia", explica.