Telecinco intenta replicar el 'Telediario'

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Carlos Franganillo, presentando la nueva era de los Informativos Telecinco.

Pedro Piqueras se pasó dieciocho años al frente de Informativos Telecinco siempre con el mismo decorado detrás de él. Un hule con una fotografía impresa del skyline de Shanghái. El fondo de plástico, de tonos azulados, fue la tecnología punta que invirtió Mediaset en los informativos a lo largo de casi dos décadas. El lunes, en la edición del mediodía, la presentadora Isabel Jiménez se despedía de ese plató, que consideró “una segunda casa”. “Este skyline se apaga para siempre”, añadió mientras el decorado quedaba a oscuras. Era la forma de dar paso a una nueva era con Carlos Franganillo al frente, en sustitución de Pedro Piqueras.

A las nueve de la noche descubrimos que Telecinco no solo le ha quitado el presentador a Televisión Española. También se ha apoderado de la imagen del Telediario. Se parece muchísimo. Estábamos viendo Informativos Telecinco pero daba la impresión de estar sintonizando la televisión pública, tanto por el presentador como por la puesta en escena. El plató ha ganado en modernidad. Una enorme pantalla curva crea una sensación más inmersiva, el suelo brillante también da el efecto espejo, crea un reflejo inverso de las imágenes que se proyectan. Los tonos son azulados y negros y a través de la realidad aumentada se generan distintas pantallas que enfatizan la sensación de dinamismo. Son informativos modernos y espectaculares. Es bastante habitual que en el día del estreno se saque más rendimiento a unas posibilidades técnicas que, después, no se aprovechan tanto. Pero, en cualquier caso, la nueva apuesta visual es, como la de TVE, muy atractiva. Franganillo, ejemplo de diligencia y rectitud, de cierta frialdad informativa, planteó un informativo convencional en cuanto a los contenidos, huyendo de noticias apocalípticas e imágenes de impacto que, tradicionalmente, han funcionado muy bien a la cadena.

Paralelamente, en La1, la hasta ahora corresponsal Marta Carazo se estrenaba al frente del Telediario 2. La periodista asumió su nuevo rol como si lo hubiera hecho todos los días en los últimos años. Transmite credibilidad, rigor y, a la vez, una sutil calidez comunicativa que no enfada porque es natural. La periodista suscita confianza. El Telediario, en su nueva etapa, priorizó el análisis de la actualidad. A partir de la información de los caucus en Estados Unidos ofreció una mirada más transversal recordando que el 2024 sería un año de muchos procesos electorales en todo el mundo. La televisión pública quiso hacer gala de uno de los ámbitos donde marca las diferencias: los corresponsales y expertos en información internacional, con Lorenzo Milá y Anna Bosch en el plató. Múltiples conexiones con las grandes ciudades del planeta, exhibiendo un punto fuerte del que no puede presumir Telecinco.

La jugada de Mediaset ha sido hábil. La televisión privada se ha disfrazado de televisión pública. Sin embargo, si tanto Informativos Telecinco como el Telediario continúan con esta apuesta por el equilibrio y la ambición, solo puede ganar la audiencia.

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