El agua del Mediterráneo también bate récords

BarcelonaLa ola de calor que hemos sufrido en los últimos días también se ha vivido en el mar. La zona del Mediterráneo hace semanas que se calienta mucho debido a la temperatura extremadamente alta del aire. Según datos del servicio marítimo del programa europeo Copernicus, a finales de junio, las anomalías de la temperatura del agua marina llegaron a ser de hasta 5 °C por encima de la media en algunas áreas. Todo ello ha provocado que Cataluña haya registrado su junio más cálido desde que hay registros, con récords de calor también en el mar.

Por ejemplo, en L'Estartit, en el Baix Empordà, el pasado 30 de junio la superficie marítima fulminó un nuevo récord: los 24,54 °C. Es la temperatura más alta registrada en un mes de junio en medio siglo de datos en esta zona litoral. y fiable de todo el Mediterráneo.

El mismo día del récord del Estartit, la boya ubicada en sa Dragonera, en la isla de Mallorca, registró una temperatura de la superficie del mar de 30,55 °C, la más alta en un mes de junio de 3 °C. se toman datos (2006). Y estos primeros días de julio la temperatura marina sigue subiendo.

anomalías de la temperatura del mar han sido especialmente grandes debido a las oleadas de calor, la sequía y la persistencia del ambiente de verano durante más tiempo", explica en declaraciones al ARA Justino Martínez, investigador del Instituto Catalán de Investigación para la Gobernanza del Mar (ICATMAR) y del Instituto de Ciencias del Mar (ICM). muy alta durante todo el verano sí que sufriremos, porque provocará un grueso de agua sobrecalentada de hasta tres o cuatro metros de profundidad, como ocurrió en el 2022", asegura Martínez, y añade que esto provocaría un aumento de los fenómenos meteorológicos extremos y perjuicios sobre todo en la flora marina, como el coral.

Un mar más caliente aporta mayor humedad a la atmósfera, lo que provoca tormentas más fuertes como las que tenemos estos días, más propias de finales de verano. En efecto, la temperatura actual del mar es más propia de agosto. "Con el calentamiento del agua, cada vez tendremos tormentas más fuertes en verano y otoño, y seguramente con más granizadas también en la costa, algo poco habitual hace tan sólo unos años", afirma.

Otra de las consecuencias de la liberación de mayor humedad del mar, junto con temperaturas más elevadas, es el aumento de la sensación de bochorno. El ambiente es cada vez más pesado en verano en la costa, también por las noches, y hace que cada vez cueste más dormir bien. De hecho, las noches tropicales y bochornosas han sido la tónica en todo el litoral en las últimas semanas, con varios récords de calor nocturno.