Cultura

30 años de una colección de cine que cada año cuesta más a los gerundenses

Salellas reclama que el Museo del Cine sea considerado museo de interés nacional

Daniel Bonaventura
y Daniel Bonaventura

GeronaEl alcalde de Girona, Lluc Salellas, ha expresado su deseo de que la Generalitat reconozca el Museo del Cine "como museo de interés nacional", y ha destacado que es un centro "único en Cataluña". Salellas ha aprovechado la ocasión del 30 aniversario del acuerdo de compra de la Colección Tomàs Mallol, firmado en 1994 por 1.200 millones de pesetas (7,2 millones de euros), para defender este reconocimiento, que no sólo ayudaría a ganar proyección internacional, sino que también reforzaría el papel del museo como centro de referencia cultural, educativo y social.

El acuerdo del año 1994 establece que el Ayuntamiento de Girona pagará 7,2 millones de euros a la familia Mallol divididos en cien anualidades actualizadas según el IPC. El coste anual de la colección ha pasado de 75.655 euros en 1994 a 158.018 euros en 2024, reflejando un aumento del IPC por encima del 3% anual de media hasta sumar un acumulado de 108,5% en los últimos treinta años. Salellas reconoce la importancia del acuerdo por Girona, pero admite que "un compromiso firmado por cien años tiene unas afectaciones lógicas en los presupuestos municipales".

Cargando
No hay anuncios

Un pacto nada habitual

El acuerdo de compra de 1994, un pacto excepcional y poco habitual, fue firmado por el entonces alcalde de Girona, Joaquim Nadal, y el coleccionista y realizador amateur Tomàs Mallol, que murió en 2013. este acuerdo, Mallol cedió al Ayuntamiento de Girona su valiosa colección de aparatos de precine y cine, fruto de décadas de investigación en anticuarios y mercados de segunda mano. La renta anual resultante de la venta quedó en herencia a sus hijas, Olga y Eva Mallol.

Originalmente, la Colección Mallol debía instalarse en la antigua Sala Edison de Figueres, pero una maniobra política del alcalde Nadal consiguió que la colección se trasladara a Girona. Este movimiento provocó una tormenta mediática en los años noventa, enfrentando al mundo convergente, dominando a la alcaldía de Figueres, y al mundo socialista, consolidado en el gobierno de Girona.

Cargando
No hay anuncios

Polémico pago diferido

En ese momento la Asociación de Contribuyentes de Figueres alertó de que el pago de los 7,2 millones de euros en un plazo de cien años, actualizado con el IPC, sería insostenible para las finanzas municipales de Girona. La asociación calculó que, con un IPC medio del 3% anual, al final del período se habrían pagado unos 44 millones de euros, más de la mitad destinados a Hacienda por el IRPF. Estas previsiones se mostraron acertadas: el pago actual a la familia Mallol está muy cercano a la cantidad estimada para 2024, pero también es cierto que el crecimiento del presupuesto municipal ha superado el incremento del IPC, en una ciudad que ha visto crecer tanto la población como la actividad económica. Así, mientras la anualidad de 75.655 € pagada en 1994 representaba una carga significativa dentro de un presupuesto de 44 millones de euros, los 158.018 € pagados en 2024 tienen un menor impacto en un presupuesto que ahora es de 149 millones.

Cargando
No hay anuncios

Un acuerdo valiente

El concejal de Cultura, Joaquim Ayats, considera que el acuerdo de 1994 fue "valiente" y permitió inaugurar en 1998 un Museo del Cine que no ha perdido la capacidad de adaptarse a los cambios tecnológicos y culturales, con el actualización constante de su exposición permanente, además de una apuesta por la sostenibilidad con la instalación de placas solares prevista próximamente. Ayats niega que la anualidad que se paga por la compra de la Colección Mallol pueda ir en detrimento de las políticas culturales o limitar las inversiones a otros museos de la ciudad.

Cargando
No hay anuncios

Efervescencia del Museo

El concejal destaca la efervescencia de actividades culturales en el Museo del Cine que implican a otras entidades y administraciones, así como "el éxito" de un servicio educativo que recibe a más de 20.000 alumnos anuales de todas las edades, el 50% de fuera de las comarcas de Gerona. La investigación especializada, con la colaboración de la UdG, dirigida a los estudiosos del cine como arte y fenómeno social, es otro pilar del equipamiento.

En sus 26 años de existencia, el Museo del Cine ha pasado de 15.000 elementos de la Colección Mallol inicial hasta los más de 60.000 que tiene hoy, gracias a un programa de adquisiciones y, sobre todo, a la "generosidad de mucha gente particular" que ha dado al museo aparatos, objetos, carteles, programas de mano, fotografías y colecciones que ayudan a explicar "los orígenes de nuestra cultura audiovisual", sostiene Ayats.

Cargando
No hay anuncios

El exalcalde Joaquim Nadal asegura que aquél fue un "acuerdo histórico, una filigrana jurídica y económica" que dio lugar a un museo que "ha crecido y se ha consolidado con éxito". Nadal ha querido mencionar los nombres de los "artífices" de la negociación: Ramon Massaguer, Joan Pluma y Joan Boadas.

Un museo "menos turístico y más social"

Por su parte, el director del museo, Jordi Pons, se muestra satisfecho de estar al frente de una institución dedicada a una temática que gana importancia porque, tal y como declara, "hoy todos llevamos el cine en el bolsillo y la cultura audiovisual es omnipresente". Y añade: "Sin duda, el valor de la colección se ha incrementado".

Cargando
No hay anuncios

Pons dirige un museo "menos turístico y más social" que recibe entre 50.000 y 60.000 visitantes anuales que asisten a la explicación de quinientos años de evolución de la proyección de imágenes y descubren que la humanidad "hace muchos años que experimenta con efectos visuales como el time-lapse y el mapping".

El presupuesto total del museo para este 2024 es de 642.800 €, de los cuales el ayuntamiento aporta casi un 70%, mientras que el resto procede de los ingresos de taquilla, ventas de la tienda y otras subvenciones.

Cargando
No hay anuncios

Una herencia que facilita la vida, pero limita

Las hermanas Olga y Eva Mallol conservan el recuerdo de los numerosos trastos que su padre coleccionaba en la casa familiar de Barcelona. "El padre pensó más en la descendencia que en sí mismo. Es cierto que una herencia como la que nos ha dejado facilita la vida, pero también nos limita, porque esta fórmula de los cien años nos impide disponer de ella plenamente", explica Olga .

Cargando
No hay anuncios

A pesar de percibir una renta anual sustantiva, esto no cambió su vida laboral. Eva, maestra de profesión, ya estaba jubilada cuando Tomàs Mallol falleció en el 2013, momento en el que la renta pasó a sus hermanas. Olga, que trabajaba como administrativa, siguió en activo hasta jubilarse a los 70 años. "No hemos hecho una vida muy diferente a la que habríamos hecho sin la herencia", afirma Olga.

Las dos hermanas tienen cada una dos hijos, destinados a heredar esta renta anual del Ayuntamiento de Girona. Eva, que vivía en Girona, se trasladó a la casa natal de su padre en Sant Pere Pescador, mientras que Olga, que todavía reside en Girona, pasa a menudo los fines de semana en Torroella de Fluvià, donde ha modernizado la casa que su padre utilizaba para exhibir su colección, hoy punto de encuentro familiar.

Olga y Eva son también patronas de la Fundación Museo del Cine-Colección Tomàs Mallol, creada en 1994 como órgano de gobierno del museo. Asisten a las reuniones del patronato, presidido por el alcalde Lluc Salellas, con representantes del equipo de gobierno y concejales de distintos partidos. "Nos gusta seguir de cerca cómo funciona la fundación y el museo; el equipo hace un trabajo excelente", afirma Olga.

Tomàs Mallol, nacido en Sant Pere Pescador en 1923, se dedicó a las artes gráficas ya la publicidad. Tras vivir en Barcelona, ​​se instaló en Torroella de Fluvià, donde acondicionó los bajos de su casa para mostrar su colección a amigos e interesados. También había habilitado una sala de proyección en la que exhibía los cortometrajes que creaba como cineasta amateur.