El análisis de Antoni Bassas: 'O Catalunya hace un cambio o no habrá tanta riqueza por repartir'

Los titulares de esta semana serán para el debate de política general que empezará en el Parlament mañana martes a las 4 de la tarde. Será el primer gran debate parlamentario del presidente Salvador Illa, que llegará con los silbidos a las orejas del Concurso de Castells de Tarragona, y en el que intentará remarcar todo lo que le une a Esquerra i Comuns, que deben aprobarle los presupuestos . Y también veremos cómo se lo hace Junts para explicar que más que oposición es alternativa.

Pero mientras el Parlament dará a los titulares, continuará el mar de fondo. Un mar de fondo español, importante, que tiene su origen en Catalunya (para no perder la costumbre) y más concretamente en la necesidad de los votos de Esquerra y Junts que tiene Pedro Sánchez. Debido a esta necesidad, Sánchez pactó la amnistía (capítulo que la derecha ya no mueve mucho porque tiene externalizado su trabajo en el Tribunal Supremo) y la financiación singular para Catalunya. Y esto le está costando caro.

Hoy, la Cadena SER publica el resultado de una encuesta de intención de voto en la que el PP amplía la ventaja que ya le sacaba al PSOE, que ahora es de cinco puntos. Es una encuesta, y no hay elecciones a la vista, pero cinco puntos es bastante. Piensen que en las elecciones de julio, que ganó el PP, la distancia fue de 1,4 puntos. ¿Y por qué cae tanto el PSOE? El grupo Prisa, entre otras razones, dice que "al PSOE le sigue pasando factura el acuerdo de financiación para Catalunya y vuelve a empeorar, por segundo mes consecutivo, la fidelidad de voto de su electorado". Piensen algo: en Andalucía , el PP le quita 11 puntos de distancia al PSOE Todo lo dice el grupo Prisa, que es más pro PSOE que pro PP. para Catalunya. Y eso que la negociación todavía no ha empezado.

El viernes, el presidente de Castilla-La Mancha, García Page, dijo lo que el dinero de los catalanes es de todo el mundo, entre otras razones porque la riqueza de Catalunya es el resultado del trabajo de “generaciones enteras procedentes de toda España”. La demagogia volverá a llevarlo todo, porque la lucha por un mínimo de financiación será una batalla calle a calle y cuerpo a cuerpo.

¿Pero saben qué es lo más triste? Que si no nos apresuramos a cambiar el estado de las cosas, Cataluña se empobrecerá aún más. Quizás en relación con España siempre sea más rica, pero empezamos a tocar fondo. No se pierdan el artículo de ayer del economista Jordi Galí titulado “Economía catalana: decir la (cruda) realidad”. En la media de crecimiento anual del PIB per cápita en el período 2000-2023, la última generación, estamos en la cola de Europa y por debajo de España. ¿Por qué si somos el 20% del PIB español o el 25% de las exportaciones españolas? Dice Galí: "El hecho de que seamos cada vez más gente y que esto nos permita producir más (crecimiento extensivo) no es consuelo para el ciudadano medio, para quien los ingresos reales se estancan. Esto es especialmente cierto en economías como la catalana , en la que los incrementos de ocupación se apoyan en buena parte en la importación de mano de obra de baja calificación y no en la disminución del paro de la población local De hecho, una parte importante del talento joven local se ve abocado a marcharse fuera, en busca de oportunidades que nuestro modelo de crecimiento no ofrece”.

Y les dejo el final para que cierre este comentario:

“El modelo de crecimiento de Cataluña de las dos últimas décadas ha sido un fracaso sin paliativos desde el punto de vista de alcanzar un crecimiento substancial del PIB per cápita. Es en gran parte responsable de muchos otros males que nos afectan, incluyendo la crisis de la vivienda, la presión sobre los recursos naturales, los pésimos resultados del sistema educativo, o el retroceso en el uso del catalán. La aceptación y promoción de este modelo de crecimiento ha sido una irresponsabilidad de los gobernantes (de todos los colores). Y los posibles beneficios individuales (con los empresarios del complejo turístico-inmobiliario al frente de los beneficiarios) no pueden esconder ni compensar el fracaso colectivo de país”.

O mejoramos ya la estructura económica catalana y frenamos el drenaje hacia España, o ya pueden ir anunciando sistemas de financiación singulares, que al final quedará poco por repartir.

Buenos días.