Becas, el otro aliado invisible

BarcelonaLa inversión económica para cursar un máster o un posgrado en Cataluña es considerable y, cada vez más, es importante conocer las distintas becas u opciones de financiación que existen. El precio de estas formaciones especializadas oscila entre 1.500 y 60.000 euros.

Para cursar estos estudios en una universidad de Cataluña, los alumnos pueden optar a diferentes becas, que se convocan cada curso académico y que tienen un plazo de presentación de solicitudes concreto. AGAUR gestiona la convocatoria de becas de carácter general para estudios universitarios que publica cada año el ministerio de Educación, Formación Profesional y Deportes. El plazo se abre a mediados de marzo. La beca de carácter general consiste en la suma de las diferentes becas que pueden otorgarse en función de la renta y del patrimonio familiar y de los requisitos académicos que se cumplan. La ayuda mínima es la beca de matrícula. A partir de ahí se pueden ir sumando otras cuantías, que se otorgan directamente.

La beca Equidad para estudios de grado o de máster habilitante en una universidad pública de Cataluña o en la UOC o en alguno de los centros adscritos relacionados con la convocatoria consiste en la aplicación de un porcentaje de minoración hasta un máximo del 80%, según el tramo de renta asignado y los estudios que curses, en el precio de la matrícula. El plazo de presentación de solicitudes se inicia el 16 de septiembre y finaliza el 31 de octubre.

La recomendación de los especialistas es pedir ambas becas, pero si al alumno se le concede la beca general, la beca Equitat quedará sin efecto. En caso de que se le deniegue la beca general, si ha pedido también la beca Equidad y se la conceden, se le aplicará la minoración que corresponda.

Además, existe un gran número de becas y ayudas de ámbito privado. Algunos centros o empresas ofrecen ayudas a los alumnos con menos recursos económicos. Cada institución determina los criterios de acceso pero tener un buen expediente académico, demostrar una buena motivación por la formación, tener una necesidad educativa especial y arrastrar una situación económica frágil o circunstancias personales sobrevenidas suelen favorecer la concesión. Los artistas y deportistas de élite cuentan con ayudas específicas.

Algunos centros premian a los exalumnos oa sus familiares con descuentos. Además, los estudiantes de familias numerosas, zonas rurales y víctimas de actos terroristas o violencia machista tienen sus propias ayudas económicas. Las personas interesadas en ampliar su formación con un máster o un posgrado también pueden beneficiarse de descuentos por el pago anticipado o pedir fraccionar el pago de su máster o posgrado.

Los estudiantes y sus familias deben asesorarse bien. “Hay unos condicionantes que impactan sobre el proceso de elección de las personas. Nuestro enfoque los organiza en los siguientes tipos: familiares, sociales, económicos, personales y psicológicos y académicos. Estos condicionantes impactan en el proceso de toma de decisiones y es necesario que los jóvenes los visualicen para que puedan neutralizarlos. Si eres consciente de que existen, puedes aislarlos”, analiza Gemma Latorre, directora de Proyectos Educativos y de Orientación.

Cambios en los criterios

El aumento en el número de personas matriculadas en estudios de master ha experimentado un crecimiento significativo del 22%, en respuesta a la demanda de especialización que ofrecen estos programas. Además, el 56% del alumnado de master son mujeres. Éstas son dos de las conclusiones destacadas delInforme de Indicadores de Formación y Docencia de las Universidades Públicas Catalanas (2023).

Según el informe que ha elaborado la Asociación Catalana de Universidades Públicas (ACUP), los universitarios catalanes son de los que más pagan por estudiar y los que reciben menos becas. El estudio destaca que en Cataluña el esfuerzo de las familias en la financiación de los estudios universitarios sigue siendo mayor que en el conjunto de España: en Cataluña, el 22% de los ingresos proceden de la matrícula; en el conjunto de España, el 15%.

Uno de los problemas habituales cuando los catalanes quieren optar a recibir una ayuda del Estado es que, por lo general, los umbrales de renta son idénticos para todas las comunidades independientemente de cuál es el nivel de vida de cada territorio. Esto hace que en lugares como Cataluña sea más complicado recibir una beca, ya que, dado que el nivel de vida es más alto, a priori los sueldos que entran en cada hogar también son más altos. Sin embargo, esto no implica que el nivel de vulnerabilidad socioeconómica sea más bajo.

Tomando de referencia los datos del curso 2019-2020, se observa cómo hubo un 44% de universitarios catalanes que solicitaron una ayuda al ministerio y, de éstos, el 67% recibieron algún tipo de ayuda. Por el contrario, los datos de los estudiantes de toda España indican que un 57% pidieron una ayuda y el 69% lo consiguieron.

Aunque la desigualdad seguirá existiendo, el anuncio del ministerio de Educación de incrementar un 5% el umbral económico para poder acceder a una beca de ayuda al estudio puede aliviar algo de esta situación. Por tanto, en el curso 2024-2025 el límite de dinero que puede ingresar una familia o un alumno que necesite acceder a una beca de estudios general o de necesidades de apoyo educativo específicas será un 5% más alto. Según el ejecutivo español, este incremento se realiza para "compensar la subida del IPC, el efecto del aumento de los sueldos y de la subida del coste de la vida".

En el curso 2021-2022 casi el 55% de los estudiantes catalanes obtuvieron una beca del ministerio de Educación, Formación Profesional y Deportes, el 11% una beca Equidad de la Generalitat, el 33% alguna exención de las que incluye el decreto de precios y tan sólo el 1% ayudas de las universidades.

En los últimos dos años la financiación pública en las universidades públicas catalanas ha recuperado el nivel que tenía antes de la crisis y los consiguientes recortes del 2011 y posteriores. En el curso 2020-2021 se empezó a aplicar la rebaja del 30% en el precio de la matrícula de los grados y posteriormente se ha aplicado la rebaja también en los estudios de máster. Otro aspecto importante que hace que el incremento de financiación no revierta cómo se quisiera en mejoras en personal, inversión en docencia y en infraestructuras en las universidades, es que la mayor financiación recibida corresponde a los incrementos salariales comprometidos ya los que las universidades deben hacer frente.

La reducción del precio de las matrículas ha cambiado los criterios y cifras de concesión de las becas de equidad de la Generalitat de Catalunya. Las exenciones de precios públicos de becas se han incrementado considerablemente por la ampliación de los supuestos que dan derecho a la exención; en cambio, las becas de equidad se han reducido al incrementar el umbral necesario para acceder.