Es Navidad

Una fiesta que no olvidarás

Navidad es fiesta y no sólo porque hay días marcados en rojo en el calendario, es un momento de encuentro, de disfrutar y compartir, donde la celebración es un elemento importante

Con los compañeros de trabajo

Seguramente la invitación que ha recibido para el almuerzo o la cena de los próximos días con los compañeros de trabajo ya no se llama celebración de Navidad, y ha pasado a llamarsewinter party. "Sobre todo en empresas internacionales no quieren apelar a Navidad para evitar herir sensibilidades, conscientes de que el personal es diverso", comenta Xènia Herrera, planificadora de eventos y CEO deNomads Events. ¿Qué deben tener los encuentros empresariales para ser un éxito? Hay que pensar en el espacio, que sea adecuado para quien lo ocupará y, a ser posible, que sea singular o tenga posibilidades para poder hacer algo que sorprenda. Facilitará que la gente vaya si está bien comunicado o si se proporciona algún tipo de transporte para que nadie tenga que conducir y no sufra si quiere tomar alcohol. Lo que marca la diferencia es la previa, cómo se comunica y si se genera suficiente expectación: "Hay que sugerir, que haya cierto misterio, que tengan curiosidad y ganas de saber qué va a pasar en la fiesta", asegura la planificadora. En función de la tipología del evento y el perfil de las personas que asistan, el menú puede ser de pie o sentado, pero que pasen cosas, se pueden dejar mensajes o plantearles enigmas. A la hora de elegir el menú Herrera sugiere que no se busque una opción navideña: "Se puede ser más creativa, ya tendrán comidas navideñas con su familia". Si hay gente joven es importante que se puedan compartir de forma fácil y con acceso rápido las fotos y vídeos que se hayan hecho. Cualquier decisión –espacio, temática, menú, música, etc.– debe tomarse teniendo en cuenta las personas que asistirán. Hay empresas que se suman a programas que compensan la huella de carbono generada por la celebración o que colaboran con una ONG o asociación local destinando el dinero que han recaudado de un bingo que organicen. "Aprovechando que es Navidad, vale la pena apelar más a la empatía", comenta Herrera.

Con la familia y amigos

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Si nos centramos en el entorno más íntimo, engalanar la casa es una forma de evidenciar que son días especiales. Hay pequeños detalles, independientemente de si se es o no religioso, que marcan la diferencia, como el árbol de Navidad, una corona o el belén. "Se pueden realizar manualidades con las criaturas, y si no se tiene tiempo o no les gusta, se pueden aprovechar las ferias locales donde hay productores artesanos", propone Herrera.

A la hora de poner la mesa dependerá del gusto de cada uno –plateados, dorados o el color que más guste, sabiendo que el borgoña es el color de moda–, pero independientemente de la elección se recomienda que el mantel sea de ropa. "Tienes que hacerlo tuyo, la Navidad. Escoge la decoración y los detalles de acuerdo con cómo eres tú", dice Herrera. La IA puede ser una buena aliada para ponernos una gama cromática a partir del color escogido. Propone combinar velas de diferentes alturas o hacer un centro de mesa con eucaliptos, que ya engalanan. También se pueden realizar detalles personalizados, dejando notas para cada uno de los invitados.

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Con clásica de fondo

Es imposible estrenar el año y no pensar en el concierto de Año Nuevo de la Orquesta Filarmónica de Viena. Un evento exclusivo en el que conseguir entradas es prácticamente imposible aunque todo el mundo puede seguirlo desde casa con la retransmisión de RTVE. Albert Galceran, periodista y divulgador musical, copresentador del programa diarioEls homes clàssics, de Catalunya Música, recuerda que el espectáculo se recuperó en 1939, para recaudar fondos durante la Segunda Guerra Mundial y como herramienta propagandística nazi. Desde entonces se ha mantenido en el tiempo una tradición que instauró Johann Strauss: "Cuando murió el padre de Johann, que se odiaban a muerte, el hijo aprovechó para levantar el vuelo. Montó una especie de franquicia, con orquestas que interpretaban sus valses, polcas y galopes". Era música concebida. Se puso de moda entre la aristocracia vienesa de la época, en la segunda mitad del siglo XIX. Empezaron estando en las fiestas aristócratas de Austria y se extendieron por el resto de Europa hasta llegar a Estados Unidos. Los conciertos de Nochevieja actuales siguen fieles al repertorio de Strauss hijo, con música festiva y pocas aspiraciones trascendentales: "Se trata de entretener y divertir", explica el periodista.

Galceran, que presentará en TV3 el Concierto de Villancicos de Sant Esteve, el concierto navideño más antiguo del mundo, nos hace una elección musical clásica para acompañarnos de fondo las comidas y encuentros navideños:

1.The Nutcracker Suitede Duke Ellington. Publicado en 1960, es el álbum que el compositor de jazz hizo con arreglos deEl Cascanuecesde Piotr Ilich Tchaikovsky. Un cascanueces jazzístico.

2.Jalousiede Yehudi Menuhin & Stéphane Grappelli. Ésta es la primera colaboración entre el violinista clásico Menuhin y el violinista de jazz Grappelli. Algunos de los álbumes conjuntos evocan música clásica y otros interpretan composiciones de Grappelli.

3.La Navidad de los tres tenoresde Josep Carreras, Luciano Pavarotti y Plácido Domingo. Todavía es uno de los discos de clásica más vendidos en Navidad. Un superclásico con tres voces de oro.

4.Sonatas para pianode Beethoven interpretadas por el pianista chileno Claudio Arrau. Nada histriónico, agradable, con dinámicas poco marcadas y una forma espiritual de entender la música.

5.El amor brujode Manuel de Falla interpretado por la virtuosa Alicia de Larrocha. Si se anima puede ver en Filmin el documental musicalLas manos de Alicia, sobre la trayectoria de una de las pianistas más excepcionales de todos los tiempos.

6.El barbero de Sevillade Gioachino Rossini. Una ópera cómica que traerá alegría con una de las grabaciones de referencia, la dirigía por Claudio Abbado e interpretada por Teresa Berganza.

7. El Concierto de Sant Esteve en el Palau de la Música Catalana. El 26 de diciembre a las 7 de la tarde. Concierto icónico, que se ha celebrado ininterrumpidamente desde 1913 y se retransmite por TV3, Catalunya Ràdio y Catalunya Música. Todos los coros de la familia coral del Orfeó Català interpretan villancicos tradicionales y actuales.

Todo el mundo a bailar

Cuando se trata de poner música para animar la fiesta y hacer que todos bailen, la recomendación del DJ y productor musical Carlos Bayona es no pretender ser exquisitos, la mejor elección es música ecléctica y variada, porque a menudo hay gente muy diferente, sobre todo en los encuentros familiares. "Ponerhitssin ningún tipo de miramiento, desde La Casa Azul hasta Raphael, los Catarras, elMelancolíade Camilo Sesto,Titaniumde David Guetta, los Buhos,Dancing queende ABBA…hitsde siempre". Spotify puede ser un gran aliado, está repleto de listas de Nochevieja que ahorran trabajo a quien no tenga tiempo o no tenga muy claro cuáles pueden ser estos temas que gustan a todo el mundo.

Este Fin de Año Bayona estará pinchando en Barcelona hasta la una de la madrugada en Razzmatazz y después en el Rouge. Se prepara las sesiones creando listas con los temas que cree que van a funcionar, y una vez está pinchando va viendo cómo reacciona el público y va eligiendo en función de lo que más gusta. Normalmente, la penúltima canción que pincha es la que considera la canción del año, que en 2025 podría ser elBerghainde Rosalía con una versión más bailable, y la última suele ser el míticoThe final countdownde los Europe. El pasado año, tras las doce campanadas, el primer tema que puso fue elHellode Martin Solveig y Dragonette, seguida deUn año másde los Mecano. Toda la sesión apostaba por temas bailables y festivaleros de los 80, 90, 2000 y temas actuales, excepto reggaeton.