Turistas paseando por la zona de los bazares de Atenas bajo el cielo naranja.
En el sur de Grecia el cielo se volvió el martes de color naranja por las nubes de polvo del Sáhara que han volado a través del mar Mediterráneo. La Acrópolis y toda la capital griega adquirieron un aspecto marciano al caer el atardecer. El viento y las bajas temperaturas han desvanecido ya el fenómeno.
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Turistas pasean por la zona de los bazares de Atenas bajo el cielo naranja
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Según el Observatorio Nacional de Atenas, la circulación atmosférica sobre Grecia favorece la transferencia de masas de aire cálido desde África a Grecia, dando lugar a temperaturas muy elevadas ya la transferencia de cantidades importantes de polvo sahariano.
Según el Observatorio Nacional de Atenas, la circulación atmosférica sobre Grecia favorece la transferencia de masas de aire cálido desde África hasta Grecia, dando lugar a temperaturas muy elevadas ya la transferencia de cantidades importantes de polvo sahariano.
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Un hombre observa desde una colina cómo el polvo sahariano cubre el cielo de Atenas
Un hombre observando desde una colina cómo el polvo sahariano cubre el cielo de Atenas.
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La ciudad de Atenas teñida de naranja por el polvo del Sáhara en suspensión
La ciudad de Atenas teñida de naranja por el polvo del Sáhara en suspensión.
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Turistas y locales pasean por el centro de Atenas mientras el polvo africano cubre el cielo
Turistas y locales paseando por el centro de Atenas mientras el polvo africano cubre el cielo.
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El polvo sahariano cubre la colina de la Acrópolis y el cielo de Atenas
El polvo sahariano cubre la colina de la Acrópolis y el cielo de Atenas.
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El polvo sahariano cubre el templo de Apolo en Corinto
El polvo sahariano cubre el templo de Apolo en Corinto.