Te presentamos a Aitana, la peor pesadilla de modelos e 'influencers'
The Clueless AI es una agencia catalana que ha creado un avatar que ya gana 4.000 euros al mes con campañas publicitarias
Aitana Lopez tiene 25 años, es de Barcelona, deportista y amante de la vida sana. Le gusta la cultura oriental, el cosplay y hace gala de ser muy extrovertida. Es modelo e influencer, cuenta con más de 160.000 seguidores en Instagram y gana, en promedio, unos 4.000 euros mensuales a base de campañas publicitarias en las redes con marcas de ropa, deporte y joyas. Pero Aitana no es una persona de carne y hueso como las influencers a las que estamos acostumbrados: es un avatar hecho con inteligencia artificial (IA) –la primera de este tipo de toda España– que tiene detrás a una agencia catalana, The Clueless AI.
Los creadores de Aitana y fundadores de The Clueless son Diana Núñez y Ruben Cruz, dos diseñadores que en 2019 cofundaron Benana Studio, una agencia de comunicación creativa para empresas. "A menudo –explica Diana Núñez– nos encontrábamos con empresas que querían hacer campañas con influencers o modelos, pero estos proyectos acababan cayendo porque las influencers eran muy caras o se acababan echando atrás, por ego o por dinero", explica Núñez. "El precio a pagar era a menudo demasiado alto para una sola campaña", asegura la cofundadora.
Fue entonces cuando vieron el auge que estaba creando la inteligencia artificial y, cansados de ser el intermediario entre marcas e influencers, se les ocurrió la opción de crear estas modelos con IA. "La verdad es que al principio no sabíamos ni por dónde empezar, solo sabíamos que queríamos una modelo que le gustara al público y que no tuviera un ego que dificultara los proyectos, pero con el tiempo hemos visto que lo hemos hecho bien", explica Núñez .
El proceso de creación no es fácil. Núñez, Cruz y su equipo se dieron cuenta rápidamente de que la gente no sigue "fotos de personas que consideran guapas", sino "vidas de personas" que admiran. "No se trata de hacer un avatar y ya está; el proceso de creación también requiere un estudio previo de mercado, fijarnos en qué está pasando a nuestro alrededor, qué le gusta a la gente, las modas, los comportamientos, y hacer una síntesis", dice la diseñadora. Así es como acabaron configurando a Aitana: una chica atractiva, exuberante, con similitudes a personas que gustan al público objetivoa quien va dirigido, como el pelo de color rosa al estilo de la cantante Karol G, y con una personalidad muy marcada.
Para crearla, le definen los objetivos en el programa de generación por IA, pero, según explica Núñez, "nunca sale bien a la primera, porque la IA todavía no consigue hacer a la misma persona en todas las fotos y, por lo tanto, se tien que retocar". Una vez creada la base, cada imagen pasa por el equipo de retocadores y diseñadores. Cada lunes, además, se reúnen todo el equipo y deciden cómo será la vida de Aitana durante la semana: "Contamos su historia, todo tiene un relato, debe tener coherencia", explica la cofundadora.
Democratizar la publicidad
Aunque hace apenas cinco meses que nació, la @fit_aitana –tal y como se la conoce en las redes– aumenta cada semana en unos 15.000 seguidores. "De momento, Aitana gana de media unos 4.000 euros al mes, pero sabemos que si seguimos a ese ritmo, tiene un potencial para llegar a 10.000 euros mensuales", explica Diana Núñez. "De todas formas, parece que nos estemos haciendo de oro, pero esa es la facturación de la agencia, hay que pagar a los trabajadores, los retocadores, etcétera".
Lo que aseguran desde The Clueless AI es que las influencers hechas con inteligencia artificial han venido para quedarse, bajar egos y democratizar el negocio de la publicidad en las redes y bajar los precios de mercado de estas campañas, que aseguran que son "desorbitados". De hecho, tenemos ejemplos clarificadores, como el de la modelo Kim Kardashian, que gana hasta un millón de euros por colgar una foto en su perfil de Instagram, lo que acaba provocando que solo se beneficien las grandes empresas con mucho presupuesto para marketing.
En el caso de Aitana, se cobran 1.000 euros por foto colgada y entre 700 y 800 por una story. Según Núñez, en el caso de una influencer real con los mismos seguidores y engagement que Aitana, "se cobraría al menos el doble". De hecho, The Clueless ya lanzó recientemente su segunda modelo hecha por IA, Maia, en este caso una chica argentina que ha venido a vivir a Barcelona y que es una enamorada del mundo de la moda, la belleza y la fotografía. A diferencia de Aitana, su carácter es más tímido e introvertido.
De hecho, la relación con las marcas ha terminado definiendo varios modelos de negocio para la agencia. "De entrada, tenemos a Maia y Aitana, que colaboran con las marcas como lo hacen las influencers normales", explica Diana Núñez. Esto implica que, si se hace una colaboración con una empresa de ropa deportiva, por ejemplo, se hace un fotomontaje con la prenda y el avatar, que queda aprobado por la marca, y "es más barato y trae menos problemas porque te ahorras toda la sesión de fotos, los maquilladores, la peluquería, el espacio, etcétera", detalla.
Por otra parte, la idea está gustando tanto entre las marcas que algunas ya empiezan a pedirles que les hagan su propia influencer, una exclusivamente para ellos, que acabe funcionando como imagen principal de la marca. "Eso también lo ofrecemos, pero es mucho más caro porque crear un avatar de cero es muchísimo trabajo", explica Núñez. Esta segunda vía pone de relieve una nueva manera de funcionar también para las empresas, y pone entre la espada y la pared el trabajo de los influencers que conocemos hasta ahora.
El debate de la realidad
Esta tendencia hacia los influencers creados con IA no está exenta de críticas. La principal es que se vende una vida irreal y se crean expectativas –tanto de vida como de imagen física– inasumibles. Ante estas críticas, Diana Núñez tiene una respuesta clara: "Nosotros nunca hemos escondido que estas influencers son creadas con IA; de hecho, sus nombres tienen la AI expresamente, por eso se llaman Aitana o Maia".
Además, asegura que "desde la creación de internet las fotos que vemos no son reales, siempre están retocadas y, sin embargo, compramos los productos que nos anuncian y lo seguimos en las redes igualmente". "Se nos ha criticado mucho, pero ¿a cuántas influencers sigue la gente que no verá nunca en la vida y que podrían ser perfectamente irreales?", se pregunta la diseñadora.
Desde The Clueless AI tienen el objetivo de seguir explorando este negocio, pronto con una nueva influencer, que "romperá los esquemas". "Podemos ser criticados porque las dos caras que tenemos ahora son chicas preciosas, pero ahora estamos creando una, Laila, que saldrá en 2024 y que tendrá un cuerpo menos normativo, coloquialmente la llamaríamos una curvy", explica Diana Núñez. Asimismo, asegura que también tienen el proyecto, más adelante, de crear un influencer del colectivo LGTBI+, pero que "aún está por definir bien", explica.
Famosos convertidos en IA
Más allá de los avatares creados de cero con IA, algunas empresas tecnológicas van un paso más allá. La matriz de Facebook, Meta, por ejemplo, está empezando a pagar millones de dólares a famosos para que cedan sus derechos de imagen para encarnar a personajes ficticios –chatbots– en las redes. Aunque Meta no ha querido desvelar las cantidades que ha pagado por estos derechos, se especula con que puede haber llegado hasta los 5 millones de dólares para los más famosos.
Entre los más conocidos está @yoursisbillie, una cuenta de Instagram que utiliza la imagen de la modelo Kendall Jenner, y que encarna a una hermana mayor que da consejos a los usuarios que le envían mensajes. Este perfil es solo uno de los 28 que encarnan el proyecto de la empresa de Mark Zuckerberg, que busca crear dobles digitales a partir de caras conocidas y cuya función es interactuar con los usuarios. Aparte de Jenner, hay muchos más: Paris Hilton es la imagen de Amber, una detective que cuenta sus aventuras; Tom Brady es la cara de Bru, un tertuliano deportivo, y Snoop Dogg es la imagen de @meethedungeonmaster, un perfil aventurero.
En una conferencia en septiembre, Zuckerberg justificaba este proyecto asegurando que "hay una gran necesidad de versiones" de famosos hechas por IA, para que la gente tenga conversaciones con un chatbot "como si fuera con un famoso". Aunque este proyecto acaba de empezar, la inteligencia artificial ha llegado a las redes sociales y todo apunta que será para quedarse.