En prisión el primer independentista que podría acogerse a la amnistía

Abel Mora entró en prisión el mismo día que el Congreso validaba la ley

BarcelonaAbel Mora, uno de los siete encausados ​​ya condenados a quien sólo la amnistía podía evitar la cárcel, ingresó el pasado jueves en Can Brians, según avanzó El Nacional y ha confirmado el ARA. Mora, condenado en el 2021 a 3 años y 9 meses de cárcel por participar en la agresión que sufrió un ciudadano que participaba en la manifestación convocada por el sindicato policial Jusapol en noviembre del 2018, ingresó en prisión el mismo día que el Congreso aprobaba la ley de amnistía, que está pendiente de publicación en Boletín Oficial del Estado (BOE) para entrar en vigor.

El abogado de oficio del joven no pidió la suspensión de la entrada en prisión pese a la ley de amnistía, pero la nueva abogada pedirá la excarcelación una vez ya esté recogida en el BOE. De hecho, Alerta Solidaria, la organización antirrepresiva que lleva buena parte de las causas de manifestantes juzgados por las protestas del Proceso, le ha incluido en la lista de los 419 activistas independentistas amnistiables y le ha ofrecido asistencia jurídica, según ha confirmado al 'AHORA. Serán los jueces quienes determinen si su caso está incluido en el texto que salió de las Cortes españolas.

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Acusado de un delito de lesiones con el agravante de discriminación ideológica, la sentencia concluye que Mora y otra persona que no ha podido ser identificada siguieron a la víctima, que llevaba colgada una bandera española a sus espaldas, hasta en la parada de metro de Urquinaona de Barcelona después de la manifestación de Jusapol. Ya en la estación, el agresor, en colaboración con Mora, que realizaba labores de vigilancia, esperó a que el hombre se encontrara ante las escaleras para propinarle un "fuerte empuje" que hizo que la víctima cayera rodando hasta golpearse frontalmente contra el suelo.

A raíz de la agresión, la víctima sufrió varias lesiones que necesitaron tratamiento quirúrgico consistente en sutura y cuidado tópico, por lo que la sentencia obliga al condenado a indemnizarle con 9.000 euros. La víctima tardó en curarse 12 días, de los que cinco estuvo incapacidad para su vida laboral, y le dejaron además como secuela un perjuicio estético moderado,según la sentencia.