'Terrer Mgz': raíz y visión
“Mostramos la austeridad y la dureza del territorio, la necesidad de conocer el lugar. Es una portada en blanco que invita al silencio, a contemplar, a distraerse delante del paisaje, la música, el vino y el Priorat”. Nace Terrero Mgz, una revista impresa, de periodicidad anual, que quiere narrar el devenir del Festival Terrer. El diseñador Gerard Joan, artífice del diseño gráfico, contextualiza su forma: “Hay que resaltar principalmente los acabados. La revista es un apéndice del festival y por eso no tiene una imagen nueva y se articula a través de la E icónica que identifica al Terrer, simulando un pentagrama y la orografía”. Echado de 4.000 ejemplares y sensación de que no todo está perdido en el periodismo. El papel sostiene la magia de un territorio que hoy agoniza por la falta de lluvia y el expolio del río Siurana. Es una cuidada edición que distingue elocuentemente los contenidos con papeles y acabados diferentes.
“Recoge la parte del pensamiento sobre paisaje, arquitectura, viticultura, sostenibilidad y cultura que el Terrer ha creado como espacio de laboratorio a lo largo de 8 años. Es una publicación de inspiración divulgativa con muchos elementos que generan cosmovisión e idiosincrasia. Y, a partir de ahí, líneas de fuga y algoritmos que permiten generar relato”, sintetiza Blai Rosés, director del festival. "Es una manera de fijar en el tiempo todas las reflexiones y contribuciones de la constelación de personas que participan", advierte. Arrapado como ningún otro en el latido de la tierra y de su gente, el festival se alía con el papel para ser “motor de activismo, cultura y pensamiento”. El primer número es, en la práctica, un manifiesto. Cabalga contenidos promocionados y editoriales. "Hay que sobrevivir", se justifica Rosés. Hay cuidado y delicadeza. Páginas llenas de intención. “Es una revista poliédrica, con el Priorat en el centro, pero que puede inspirar e impactar en todo el sur de Catalunya por la innovación social y el dinamismo empresarial que lo habita. Esta región viene de un largo abandono, pero hoy tiene una constelación de bodegas que generan biodiversidad, riqueza y referencia internacional”, matiza. En dorado y papel de satén, una carta de vinos elaborada por periodistas y sumilleres: “Es independiente, a medio formato entre guía y crítica periodística. Nos parecía interesante mostrar un mosaico de vinos emblemáticos de la DOQ Priorat y la DO Montsant”. "Las casas hablan de nosotros y del tiempo que nos ha tocado vivir", escribe la historiadora Anna Figueras en Terrero Mgz. "Nuestro trabajo es dar a conocer el Priorat, explicar los vinos, dignificarlos y reforzar su valor como alimento que sostiene el paisaje cultural", concluye el director.