Me Too en las bibliotecas: estudian sancionar a un documentalista por colgar fotos de culos de colegas
El profesional, que niega haber publicado ningún desnudo, dice que hizo la web hace 15 años y que no se lo puede juzgar con los parámetros actuales
BarcelonaEl Me Too en el ámbito laboral escribe un nuevo capítulo en la denuncia contra un documentalista que habría colgado imágenes de contenido sexual de compañeras de profesión sin su consentimiento, en una web que había titulado gráficamente ArtiCulitos. A raíz de la denuncia que ha hecho una colega a través de la red social X (antes Twitter), el Colegio Oficial de Bibliotecarios-Documentalistas de Catalunya (COBDC) ha emitido un comunicado en el que lamenta "profundamente" los hechos y asegura que seguirá el caso para "emprender las medidas disciplinarias que hagan falta" hacia el presunto responsable de mensajes "machistas y contenidos vejatorios". Por su parte, el denunciado ha rechazado las acusaciones de publicar imágenes de mujeres desnudas y ha pedido perdón: "Creo que no debería ser juzgado hoy por un acto erróneo que cometí hace muchos años", ha escrito Tomàs Baiget, asegurando que cerró la página cuando tres amigas "de confianza" le pidieron que retirara sus fotos, donde aparecían vestidas y sin ningún aparente detalle que las identificara, pero que desconocían que formaban parte de la peculiar galería fotográfica.
La denuncia la ha hecho una documentalista mallorquina, que ha explicado que Baiget se dedicaba a tomar fotografías a mujeres colegas que conocía en congresos y encuentros con la excusa de incluirlas en un directorio de profesionales. La web desapareció hace 15 años y ya no está activa, pero los internautas han logrado recuperar algunas partes a través del archivo de internet. En la página inicial, Baiget presenta su iniciativa como un sitio de fotografías captadas furtivamente y sin permiso de las mujeres..
Posteriormente, ante el revuelo creado en la red social, Baiget ha salido al paso explicando que ArtiCulitos era una web que abrió con su hija en 2008 para ayudarla en un trabajo, ha asegurado que "no había nada indecente” y ha criticado que se lo haya relacionado "de forma gratuita" con su trabajo profesional.
Horas después, el denunciado se ha defendido con un comunicado en el que niega que colgara "fotos de desnudos ni subidas de tono" y limita la presencia de sus colegas a solo "las tres amigas" que aparecían sin su consentimiento y que le pidieron que borrara las fotos.
En el texto, Baiget reclama que no se juzgue una actitud de hace 15 años con los actuales parámetros, atendiendo a que la sociedad "ha cambiado mucho y que lo que antes pudo ser divertido hoy resulta inadmisible y reprobable", admite.
Pero el COBDC da por buena la versión de que la web tenía contenidos "de carácter erótico" de documentalistas, algo que considera "absolutamente inadmisible, ya que es un claro abuso sexual, dado el no consentimiento", subraya el comunicado. La junta del colegio también muestra su apoyo a las víctimas y, en especial, a la “valentía” de la persona denunciante de “un episodio tan execrable”.
En cuanto a las posibles consecuencias, el COBDC explica que los hechos incurren en la vulneración de dos de los artículos de su código deontológico, algo que les permitiría “emprender acciones sancionadoras” si el caso sigue agravándose, “a razón de nuevas denuncias, tanto de personas colegiadas como no”.
Pocas denuncias
Según el ministerio de Igualdad, en el ámbito laboral se producen casi dos de cada 10 acosos sexuales, pero las tasas de denuncias son muy bajas: la ausencia de protocolos contra la violencia sexual de las empresas y el miedo a perder su trabajo es una de las causas principales a la hora de callar al ser víctima de ataques físicos o verbales, como miradas o gestos lascivos, comentarios groseros, invitaciones indeseadas o acorralamientos y contacto físico indeseado.