El malestar no ha hecho vacaciones

Sabías que volverías de un paseo y te estaría esperando otra desgracia en el móvil en forma de incendio o de masacre. En la sobremesa, una joven te decía que tenía la sensación de estar jugando a los juegos del hambre. Una persona muy mayor comentaba que los jóvenes quizás podrían cambiar las cosas en el futuro, pero que le entristecía ver que las aspiraciones de su juventud, los derechos humanos, la democracia o la justicia social, parecía que ahora ya no tuvieran ningún valor.

Cómo quieres que la dignidad y el respeto no pierdan valor, si la vida misma lo ha perdido. Y como ya no se puede matar a escondidas, ahora se mata de cara y de día. El gobierno de Israel ordena el asesinato de periodistas, en un contraste curioso: el oficio más vilipendiado del mundo sigue molestando al poder. No quieren que os forméis vuestro propio criterio, quieren quedarse vuestros datos para que os sintáis pequeños y vigilados y penséis que no hay nada que hacer. O para que, si os atrevéis a contradecirlos, tengáis miedo a las consecuencias. De momento ya han conseguido que una parte de la gente, empobrecida, grite "¡viva las cadenas!"

Europa se ha limitado a emitir comunicados de rechazo mientras se militariza, siguiendo el camino que indica Estados Unidos, donde el presidente ya ha sacado a las tropas a la capital y hace bromas sobre el hecho de que si el país entrara en guerra él podría ahorrarse las elecciones.

La catalanofobia aparece en una heladería de Gràcia y por toda respuesta el Govern contesta que se alejará de situaciones que utilicen la lengua como un elemento de confrontación. Para los que se mofan del catalán en Catalunya ¿el gobierno de Catalunya no tiene ni una palabra de condena? ¿Ponemos la otra mejilla? ¿Cuál es la estrategia? ¿De qué sirve haber creado la conselleria de Política Lingüística? Septiembre comienza con malestar.