Películas en español en IB3
Después de diez años, IB3 vuelve a emitir películas dobladas al castellano y ha eliminado la opción de ver en catalán las películas que emite como estrenos. Lo ha denunciado la Obra Cultural Balear (OCB), y el presidente de esta entidad, Antoni Llabrés, ha recordado a la dirección de IB3 que la apuesta de la televisión pública de las Baleares por la lengua catalana y su normalización no es ninguna opción que pueda variar según quién ocupe la dirección, sino un mandato legal a cumplir. Con su decisión de emitir contenidos en castellano, la dirección de IB3 incumple una serie de leyes: el Estatuto de Autonomía, que consagra el catalán como lengua propia de las Baleares; la ley de normalización lingüística; la ley audiovisual de las Islas Baleares y, en particular, la ley del Ente Público de Radiotelevisión de las Islas Baleares, que especifica lo siguiente (vale la pena la cita in extenso): "La programación del Ente Público de Radiotelevisión de las Islas Baleares debe cumplir las funciones de servicio público y debe contribuir a la normalización de la lengua y la cultura propia de las Islas Baleares. La lengua vehicular de toda la programación es el catalán. [...] Estos requisitos también son aplicables a la producción audiovisual del ente y de las empresas filiales prestadoras". En efecto, si no trabaja en catalán y a favor del catalán, IB3 deja de realizar su labor como servicio público y, por lo tanto, deja de tener sentido que esté pagada con los impuestos de los ciudadanos de las Baleares. Para ver películas y programas en castellano ya tenemos todo el resto de la oferta televisiva, con la excepción de TV3 (À Punt no se puede sintonizar desde las Baleares, y además ahora también se la cargan).
El único motivo para emitir en español a IB3 es, como siempre, político e ideológico. Hemos dicho que vuelven después de diez años, y con el propio director general de entonces: Josep Maria Codony, un periodista que fue afiliado del PP, impuesto en el cargo el pasado abril únicamente con los votos favorables de PP y Vox. Además de los argumentos planteados anteriormente, cabe decir también que las audiencias de IB3 en tiempos de Codony fueron misérrimas; en cambio, emitiendo íntegramente en catalán, como ha hecho en las dos legislaturas del gobierno progresista y había continuado haciendo durante estos dos años, ha llegado a sus mejores resultados en los audímetros. Pero seguramente no les importa eso, como tampoco la dignidad profesional de los trabajadores de la televisión y la radio públicas.
El PP de las Baleares sigue haciendo su papelón, aprobando con una mano y con los votos de la izquierda las ayudas para las entidades ciudadanas que trabajan por el catalán (la propia OCB o Joves per la Llengua, mientras sus socios de Vox los insultan con exabruptos), y con la otra atacando la escuela pública y en catalán, desmontando los derechos lingüísticos de los usuarios de la sanidad pública y, ahora, desvirtuando la televisión y la radio públicas. Para ser los que no encontraremos en la confrontación lingüística, como repite obsesivamente la presidenta Prohens, se están luciendo a fondo.