La amnistía a Puigdemont ya tiene fecha para debatirse en el Supremo

MadridEl Tribunal Supremo ha fijado para el 10 de marzo a las 10.30 horas la vista pública para estudiar la aplicación de la amnistía -o no- a Carles Puigdemont, según ha podido saber el ARA. El pasado 10 de septiembre el magistrado instructor, Pablo Llarena, va confirmar que no aplicaba la amnistía por el delito de malversación, y el recurso de apelación que presentó la defensa del líder de Junts aún no se ha resuelto. Tras meses de espera, la sala de apelaciones ha puesto fecha para estudiar los argumentos de las defensas y de la Fiscalía, partidaria de amnistiar al expresidente de la Generalitt y poner fin a esta causa. La sesión será en abierto y el tribunal estará formado por los magistrados Vicente Magro –exsenador del PP–, Eduardo de Porres y Susana Polo, y las perspectivas que contradigan lo que ya han dictaminado Llarena y Manuel Marchena sobre esta cuestión son escasas.

Cuando se haya tomado una decisión, Puigdemont y el resto de exiliados procesados ​​por el Proceso, Toni Comín y Lluís Puig, habrán agotado el recorrido en el Supremo y, en caso de que la resolución sea desfavorable, tendrán vía libre para acudir al Tribunal Constitucional (TC). Precisamente esta próxima semana, el TC debatirá la admisión a trámite de los recursos de amparo que presentaron Oriol Junqueras, Raül Romeva y Dolors Bassa contra la no aplicación de la amnistía por parte del Supremo. En su caso, el tribunal presidido por Marchena ya cerró la puerta definitivamente. Con toda probabilidad, el TC admitirá a trámite los recursos y, más adelante, se abordará el fondo del asunto. Antes, sin embargo, se analizarán la cuestión de inconstitucionalidad que ya presentó el Supremo contra la ley de amnistía y también el recurso del PP, que ya darán respuesta de forma global al encaje legal del conjunto de la norma.

Aunque el recurso de amparo de Puigdemont tarde, la brecha para un regreso a Catalunya sin tener que pasar por la cárcel puede llegar antes. Cuando el TC resuelva la impugnación del PP, no habrá todavía un criterio sobre si el delito de malversación es también amnistiable, pero sí que habrá un pronunciamiento sobre el levantamiento de las medidas cautelares que prevé la ley –es decir, sobre las órdenes de detención e ingreso en prisión– que de forma que a Llarena no le quede fuentes jurídicas. El archivo de la causa, eso sí, debería esperar al menos a la resolución del TC sobre la aplicabilidad al delito de malversación. Sin embargo, el Supremo todavía tendría la vía del Tribunal de Justicia de la Unión Europea para seguir torpedeando la amnistía.