Los beneficiados por las licencias por edad se tendrán que reincorporar al Parlament, pero podrán teletrabajar al 100%
La cámara aprueba en paralelo un nuevo régimen de reducción de jornada y de prejubilación para todos los funcionarios
BarcelonaLa mesa ampliada del Parlament –con representación de todos los grupos– ha aprobado que los beneficiados por las licencias por edad ya concedidas –y que estaban cobrando sin trabajar– se reincorporen formalmente a su puesto de trabajo a partir del 1 de noviembre. Ahora bien, con la posibilidad de hacer teletrabajo al 100% y también con excepciones. De acuerdo con la propuesta, que ha recibido el apoyo de Junts, ERC y el PSC (la CUP y Cs se han abstenido y Vox y comuns han votado en contra), y que ahora tendrá que ser ratificada por la comisión de asuntos institucionales (CAI), no tendrán que volver aquellos a los que les quede solo un año para acabar la licencia, los que tengan una "incapacidad temporal", los que se tengan que hacer cargo de un familiar o los que hayan pasado una enfermedad oncológica.
Paralelamente, en la misma reunión de la mesa ampliada también se ha aprobado un nuevo régimen de reducción de jornada progresiva y de prejubilación para todos los funcionarios de la cámara que incluye también la posibilidad de prejubilarse tres años antes de lo previsto con un sueldo máximo equivalente al tope de las pensiones. Para acceder a este se fijan las siguientes condiciones: se tienen que haber prestado 25 años a la cámara catalana, solo deben faltar cinco años para la jubilación y en los últimos tres es cuando se puede dejar de trabajar.
Así pues, el Parlament ya no prevé cobrar casi la totalidad del sueldo sin trabajar, como en las antiguas licencias por edad, pero sí jubilarse antes de tiempo –haciéndose cargo el Parlament de las cotizaciones sociales para no ser penalizados cuando se jubilen– con el sueldo que les correspondería cuando estén retirados. Se fija así el mismo tope que en las pensiones, unos 2.819,18 euros mensuales. En cuanto a la reducción de jornada progresiva, hay una reducción equivalente del sueldo, pero que se complementa con otra parte de lo que tendrían que cobrar de pensión. Por ejemplo: un funcionario que reúna estas características y se acoja a la mitad de la reducción de la jornada, percibiría la mitad de su retribución y la mitad de la retribución equivalente a la pensión que le correspondería.
Tira y afloja de medio año
La decisión de la mesa ampliada llega después de un tira y afloja de medio año entre la mesa y los funcionarios de la casa, que no han acabado avalando este planteamiento. Desde el consejo de personal, de hecho, tal como avanzó Efe, se ha pedido una mediación externa para garantizar el cumplimiento de los acuerdos. Y es que hace solo unas semanas la mesa había hecho una propuesta más beneficiosa para los funcionarios que la presidenta de la cámara, Laura Borràs, acabó frenando.
En aquel caso, el régimen se denominaba excedencia voluntaria incentivada y podían acceder a él todos los mayores de 60 años con solo quince años trabajados en la cámara y cobrando un sueldo "equivalente a la prestación de la pensión de jubilación que les correspondería". Finalmente, sin embargo, después de hacerse pública la propuesta y que habría críticas, se acabó retirando.
Con la propuesta de este martes se pone punto final a un proceso de negociación con los trabajadores para definir en qué situación quedan los funcionarios que estaban disfrutando las licencias por edad. El ARA destapó en enero que la cámara catalana se gastaba unos 2 millones de euros anuales al pagar a una veintena de funcionarios que no trabajaban –con sueldos de hasta 10.000 euros al mes– y, a raíz de la alarma social generada, la mesa de la cámara decidió eliminar esta posibilidad del reglamento de personal. Aun así, como había 21 personas que estaban disfrutando de ella y 12 más que la tenían que empezar a disfrutar este año, la mesa ha tenido que definir un régimen para estos funcionarios concretos.
Así, más allá de los trabajadores que ahora se tendrán que reincorporar a este régimen específico, ya nunca más ningún otro funcionario de la cámara podrá cobrar sin trabajar durante cinco años antes de jubilarse percibiendo casi la totalidad del sueldo.