El Congreso concluye que Cospedal y Rajoy dirigieron la operación Kitchen

Unidas Podemos y los soberanistas presentan un voto particular que critica la opacidad de los fondos reservados

MadridEl Congreso va más allá que la Audiencia Nacional en las responsabilidades del caso Kitchen. Las conclusiones que la comisión de investigación ha aprobado este miércoles apuntan que el operativo de espionaje al extesorero del PP Luis Bárcenas –para robarle información comprometedora para el partido– se dirigió desde la sede de la calle Génova y "con conocimiento" de la secretaria general María Dolores de Cospedal, "que informaba" al entonces presidente, Mariano Rajoy. Los diputados han validado el texto presentado por el PSOE gracias a los votos de Unidas Podemos y EH Bildu. ERC y la CUP se han abstenido y Junts no ha participado en la sesión. Los independentistas catalanes habían redactado con Unidas Podemos unas conclusiones alternativas que se llevarán a pleno.

"La finalidad de la operación Kitchen era la obstrucción de las investigaciones judiciales en marcha y que las pruebas que pudieran estar en posesión de Bárcenas se destruyeran u ocultaran para que nunca fueran utilizadas por la administración de Justicia, e incluso por los mismos miembros de la policía que actuaban como policía judicial. Y para esta finalidad de interés particular exclusivo del PP se utilizaron ilegalmente fondos reservados y efectivos policiales", concluye el documento. Va en la misma línea de la investigación judicial que ha instruido el juez Manuel García Castellón y que está en fase de procesamiento. La diferencia es que a nivel judicial solo ha salpicado al exministro del Interior Jorge Fernández Díaz.

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Desde el principio, todas las formaciones excepto el PP validaron la tesis, pero la votación refleja algunas discrepancias. Unidas Podemos, Esquerra, Junts, EH Bildu y la CUP registraron un texto que criticaba la opacidad en el uso de los fondos reservados y señalaba la "deficiencia" de las leyes que lo permiten. Además, en sus conclusiones recordaban que el excomisario José Manuel Villarejo explicó en su comparecencia a la comisión el enfrentamiento que mantuvo con el Centro Nacional de Inteligencia. El organismo de los espías españoles, relató, habría querido evitar que saliera a la luz información comprometedora para "altas instituciones del Estado" en poder de Bárcenas, como por ejemplo cuentas bancarias en Suiza vinculadas con Juan Carlos I.

El PSOE se ha mostrado intransigente con esta última cuestión y ha provocado que estas formaciones hayan decidido elevar a pleno en forma de voto particular sus propias conclusiones, que en comisión han quedado rechazadas. Lo que sí que han acordado es incorporar dos enmiendas al texto que habían presentado los socialistas: una de ellas destaca que la información que el Congreso ha solicitado –mayoritariamente al ministerio del Interior, a pesar de que no se explicita– ha tenido una "respuesta variada". Unidas Podemos se queja de que en algunos casos no se ha obtenido la información solicitada o ha llegado tarde. La segunda modificación es que la comisión ve "oportuno revisar los procedimientos de uso y control de los fondos reservados" y también el de "concesión de condecoraciones a la Policía Nacional".