Crónica

Cospedal reaparece pero solo para cargar contra el 1-O y ETA

La ex número 2 del PP se acoge a su derecho a no declarar ante la comisión del caso Kitchen

MadridLa comparecencia de María Dolores de Cospedal en la comisión del Congreso encargada del caso de espionaje Kitchen había despertado muchas expectativas. El 2 de junio se suspendió porque justamente se supo que el juez Manuel García Castellón había decretado su imputación y los diputados pensaron que se acogería a su derecho a no declarar. "Me parece muy fuerte. ¿Por qué me han desconvocado? ¡Qué tontería!", se quejaba desde los pasillos de la cámara baja. La avisaron con tan poca antelación por correo electrónico que se enteró cuando ya había llegado al Congreso. Ese día estaba dispuesta a declarar, según explica, pero este jueves ha preferido acogerse a su derecho a no decir nada sobre el caso porque la Fiscalía, el PSOE y Unidas Podemos –que ejercen la acusación popular– han recurrido el archivo.

La ex secretaria general del PP ya está retirada de la política, a pesar de que si fuera por ella sería presidenta del partido –perdió las primarias de 2018–. Las dos veces que se ha dejado ver en el Congreso no ha desaprovechado la ocasión para exponer la línea dura que la caracteriza. Durante la comparecencia, más allá de explicar los motivos por los que no respondería a los diputados, ha roto su silencio solo en dos ocasiones: para cargar contra el 1-O y contra ETA. El diputado de Junts Josep Pagès ha recordado la vinculación de Cospedal con la Operación Catalunya y se ha referido al referéndum, y la exministra de Defensa ha visto una oportunidad para colar su primer ataque. "Las fuerzas y cuerpos de seguridad defendieron la legalidad contra aquellos que intentaron provocar un golpe de estado", ha subrayado.

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También ha reprochado a Pagès que insinuara que ella hizo política para "meter la mano en la caja". "No es mi caso", ha subrayado, y ha criticado que la acuse desde el Congreso, donde lo protege la inmunidad parlamentaria. "Si me lo dijera en la calle, me podría querellar", ha apuntado. El diputado de EH Bildu Oskar Matute, que ha contextualizado que en el barrio donde ha crecido este tipo de frases suenan a amenaza –"Me lo dices en la calle"–, ha abierto una nueva rendija para que Cospedal soltara el segundo dardo: "He señalado que este tipo de afirmaciones si se dicen fuera pueden ser objeto de una actuación judicial. Yo no sé de dónde viene usted, o sí que lo sé, que lo sabemos muchos. De donde vengo yo quiere decir que puedo hacer una acción judicial, no otro tipo de acción con armas u otras cosas".