La extrema derecha mueve ficha en Manresa: Sergi Perramon presenta su nuevo partido

BarcelonaAvance Nacionalista. Éste es el nombre del nuevo partido que el concejal del Grupo Nacionalista Sergi Perramon ha presentado esta tarde en el Café-teatro El Voilà de cara a las próximas elecciones municipales. El edil, que se desvinculó del Frente Nacional de Cataluña (FNC) un año después de los comicios, asegura que quiere crear una plataforma de "centrederecha" para ser la primera fuerza o al menos poder formar gobierno. Rehuyendo de siglas y sin la marca de ningún partido, Perramon quiere acordar una gran coalición con Aliança Catalana, Junts o Impulsem, pero que no implique en ningún caso una absorción.

El debate de fondo será, sin embargo, si este nuevo partido va bajo el paraguas de estas formaciones. "Hay que ser generosos", no se cansa de repetir el portavoz, que recuerda que el espacio que representa está ahora "muy fragmentado" como para aspirar a desbancar a ERC. No en vano, hasta tres listas podrían llegar a presentarse si no hay entendimiento entre Avenç, Aliança y el FNC que, aprovechando los derechos electorales, también podría presentar batalla electoral. La capital del Bages es uno de los bastiones de la extrema derecha. En las últimas elecciones al Parlament, Aliança y Vox sumaron el 16% de apoyo del electorado.

"Manresa necesita cambiar de rumbo y el 2027 es la oportunidad decisiva. Esta plataforma que hoy planteamos quiere ser el punto de encuentro de todos aquellos que quieren una Manresa más próspera, más segura, más nuestra, más catalana", ha señalado este jueves Perramon. Por este motivo, ha pedido altura de miras en el resto de partidos. "No queremos una ciudad al servicio de intereses externos, ni que los partidos sigan utilizando el municipio como un simple pretexto para hacer crecer el poder de las siglas", añadió, ante sesenta personas.

Con un 20,59% de inmigración, el nuevo líder de Avance Nacionalista ha hecho hincapié en la necesidad de regular la llegada de gente proveniente de otros países. "La única forma de mantener la cohesión social, salvaguardar el estado del bienestar y asegurar la integración en la cultura nacional es poner límites a los flujos migratorios", ha afirmado. "Si hay límite de velocidad, de contaminación o de patrimonio, ¿no se podría limitar un fenómeno tan descontrolado?", remachó. Y ha sentenciado: "No queremos la Manresa de los 100.000 habitantes, no podemos convertirnos en el patio trasero del AMB ni en el ministerio de Asuntos Sociales de otros países".