Crisis en el Govern

Aragonès defiende la continuidad de Junts en el Govern: "Hay margen para llegar a acuerdos"

Batet reclama "generosidad" al 'president', que insiste en la necesidad de "máxima lealtad institucional" entre socios

BarcelonaCuando faltan menos de 24 horas para que la militancia de Junts empiece a votar sobre la salida o no del Govern, el president Pere Aragonès ha querido defender públicamente la continuidad del ejecutivo con los de Junts. "Mi voluntad es que este Govern siga, que pueda seguir de forma sólida, centrado al 100% en la tarea de gobierno y con la implicación total de las formaciones". Así se ha expresado en el pleno del Parlament, en la misma línea de lo que ya trasladó este martes a los consellers en la reunión semanal del consejo ejecutivo, en la que también descartó un escenario de adelanto electoral.

Aprovechando el altavoz de la sesión de control, Aragonès también ha querido mandar un mensaje a su socio de gobierno, asegurando que "hay margen para llegar a acuerdos" en los tres puntos que JxCat fija como imprescindibles para mantener la coalición: la dirección estratégica del independentismo, la mesa de diálogo y la coordinación de los dos partidos en Madrid. Lo ha dicho después de que el presidente de Junts en el Parlament, Albert Batet, apelara a su "responsabilidad" y "generosidad" ante la crisis y recordara que, hasta ahora, Esquerra ha rechazado todas las propuestas que han puesto sobre la mesa para cumplir el pacto de gobierno y el "mandato" del 52%. "Nosotros nos lo autoexigimos, como le corresponde a usted", ha dicho.

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Batet: "Tenemos el deber de cumplir con el mandato del 52% que nos pidió que avancemos hacia la independencia".

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Aragonès ha mostrado su predisposición a hablar, pero también ha reclamado "voluntad de acuerdo": "Ni uno puede imponer al otro ni el otro hacerlo con el primero". Además, ha apuntado que no serviría de nada llegar al entendimiento si "al cabo de 15 días volvemos a estar igual", y ha subrayado que la continuidad del Govern requiere que los dos socios estén "implicados al 100%" y "sin dudas, con corresponsabilidad, respeto mutuo y máxima lealtad institucional". Con las negociaciones hoy por hoy paradas y las dos partes pendientes de la campaña abierta en el seno de Junts, el president también ha querido expresar "respeto" por la consulta de Junts. "Las formaciones políticas toman las decisiones como consideran conveniente [...]. No puedo hacer otra cosa que mostrar respeto por las decisiones de otras organizaciones", ha dicho.

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El aviso de la 'consellera' Geis

A diferencia del debate de política general, cuando JxCat verbalizó la amenaza de pedir una cuestión de confianza, este miércoles no ha habido choque dialéctico entre Aragonès y Batet, pero la situación de excepcionalidad fruto de la crisis en el Govern se ha hecho notar en el hemiciclo. La consellera de Investigación y Universidades, Gemma Geis (Junts), se ha negado a responder a una pregunta oral en el pleno sobre la situación del transporte público en la Anoia, formulada por el PSC. Ha querido así evidenciar la destitución del vicepresidente del Govern Jordi Puigneró, que también era consellera de Políticas Digitales y Territorio. "No hay vicepresidente y, por lo tanto, a mí no me corresponde responder a esta pregunta", ha dicho, a pesar de que ahora es ella quien asume de forma interina las competencias del departamento.

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No ha sido el único gesto de Geis. En respuesta a otra pregunta de la oposición, ha puesto en cuestión su propia continuidad en el ejecutivo: "Si no cumplimos los pactos de gobierno y no puedo asegurar que en Madrid vamos con la fuerza para defender el sistema universitario, no me veo capaz de seguir desarrollando mis tareas como consellera", ha afirmado. Una reflexión que no hace prever, tal como reclama Aragonès, que la estabilidad del ejecutivo no vuelva a quebrarse por las divergencias entre los socios.

"Más que nunca necesitamos instituciones sólidas [...] y que, a pesar de las incertidumbres del momento, el Govern sigue trabajando con toda la fuerza", ha dicho posteriormente el jefe del Govern, que se ha mostrado convencido de que, pase lo que pase, habrá presupuestos para el 2023. Si Junts sale de la ecuación, sin embargo, Esquerra tendrá que buscar el apoyo del PSC y los comuns, que este miércoles han criticado la inoperancia del ejecutivo. "Sea cual sea el desenlace, se puede afirmar que esto no va", ha afirmado el líder socialista, Salvador Illa, mientras que el portavoz de los comuns, David Cid, ha exigido "garantías de que, pase lo que pase, el Govern no estará ahogado en una crisis permanente". "Mi tarea y compromiso es trabajar para que los objetivos por los que se formó el Govern sigan adelante", ha insistido Aragonès, a pesar de que ahora mismo este horizonte no depende exclusivamente de él.