El caso Errejón desencadena una crisis política en Madrid

Madrid"Nuestro compromiso contra el machismo y por una sociedad feminista es firme y sin excepciones". Así reaccionó en un mensaje a X Yolanda Díaz a la dimisión de quien designó como portavoz de Sumar en el Congreso, a Íñigo Errejón, perseguido por acusaciones de violencia psicológica, acoso sexual y comportamientos vejatorios con mujeres. La imagen del proyecto queda tocada, pero amenaza también la bandera feminista del gobierno español. La encargada de plantearlo en estos términos ha sido la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, siempre a la vanguardia de la oposición que el PP practica contra Pedro Sánchez: "Otra pancarta que se les cae", ha dicho desde Galicia.

En la Moncloa y en el PSOE subrayan que se enteraron de los hechos cuando Errejón hizo público el comunicado este jueves a primera hora de la tarde. Fuentes gubernamentales aseguran que el caso no les "afecta" y que nada tiene que ver con el ejecutivo del Estado. "No va de partidos, va de víctimas", subrayan. En un tuit a X, el presidente, Pedro Sánchez, mostraba todo su "apoyo a las mujeres que sufren acoso y abusos" y "toda la condena a quien atenta contra este proyecto de igualdad" por el que, asegura, trabaja su gobierno. Además, expresaba su "confianza" en Díaz y Sumar, "una organización que ha hecho y está haciendo mucho por el progreso de las mujeres".

Pero el PP está decidido a utilizar este caso para desgastar al gobierno español. En la legislatura anterior, la crisis más grave de la coalición fueron los efectos de la ley del sólo sí es sí cuando se confirmaron rebajas de penas de agresores sexuales, al contrario de lo que el ministerio de Igualdad de Irene Montero había vaticinado. La derecha y la extrema derecha se cebaron contra el gobierno español y ahora, con el caso Errejón, vuelven ante la sospecha que Sumar haya "encubierto" durante tiempo en su ya exportavoz, dado que hace un año hubo otra denuncia en las redes que acabó borrando. "Si lo sabían desde hace un año, que una persona que ellos conocían tenía estas conductas, lejos de denunciarlas, las han tapado ya él le han hecho portavoz de Sumar en el Congreso. Es decir, le han ascendido en su proyección política", criticó la número 2 del PP, Cuca Gamarra, en una entrevista en Telecinco. En el PSOE, sin embargo, lamentan que en Génova se haga "broma" de un hecho "tan grave" y se esté diciendo que "Sumar ya tiene su caso Ábalos".

La crisis es especialmente grave en el espacio de Sumar. La avalancha de testigos que han decidido denunciar públicamente, aunque sea a través de la periodista Cristina Fallarás, comportamientos machistas en el ámbito sexual de Errejón han causado conmoción en las filas del espacio. "Desgraciadamente, no hemos sabido hacer lo suficiente y no tengo palabras para expresar mi profunda preocupación y apoyo a todas las víctimas. Estamos hartas y todos los casos deben salir a la luz", ha twittado la ministra de Sanidad, Mónica García , sucesora de Errejón como líder de Más Madrid. También la líder de Izquierda Unida y ministra de Juventud e Infancia, Sira Rego, ha pedido una reflexión de fondo. "Esto debe abrir un debate muy profundo en las organizaciones de izquierdas y hay que reconocer que las estructuras machistas, las estructuras patriarcales, están presentes en todas las organizaciones. En las de izquierdas también", ha afirmado.

El futuro de Sumar

En cuanto a Sumar, pierde su cara visible en la Cámara Baja, que hasta el día antes de la renuncia –ya con una investigación interna en marcha– había hecho declaraciones en nombre de Sumar en los pasillos del Congreso. La renuncia abre el melón de su sustitución. Con la elección de quien fue fundador de Podemos, Díaz situaba un perfil de su facción dentro del grupo parlamentario. Errejón, enfrentado con el partido lila desde hace años, también acabó mal con Más Madrid, proyecto que también impulsó, pero del que se distanció con el ascenso de Mónica García. Hacía tiempo, explican en el partido madrileño, que Errejón ya no respondía ante ellos y no se le consideraba como su cuota dentro de Sumar. Habrá que ver si Díaz puede imponer otro nombre de su cuerda después de que la elección de los dos últimos portavoces haya sido un fracaso.

Errejón ascendió a portavoz parlamentario en febrero tras la renuncia de Marta Lois, diputada gallega de la máxima confianza de Díaz, que después de meses siendo cuestionada dentro del grupo de Sumar en el Congreso renunció por concurrir como candidata a las elecciones autonómicas de Galicia. Lois no obtuvo representación y abandonó la política. La portavoz adjunta primera de Sumar es Aina Vidal, de los comunes, pero no está claro que sea el relevo de Errejón. El vacío que deja puede implicar que otras formaciones –Izquierda Unida, Más Madrid o Compromís– pidan tener más visibilidad y Díaz vuelva a esforzarse por mantener el equilibrio de fuerzas interno, ya delicado, y que la llevó a dar un paso al lado y dimitir en junio como líder del movimiento.

Este viernes, de hecho, Esquerra Unida ya ha pedido una reorganización del grupo parlamentario de Sumar en el Congreso. "Todas las organizaciones deben ser copartícipes de las decisiones que se tengan", ha exigido su líder, Antonio Maíllo, en declaraciones desde Andalucía. La decisión llega, además, en plena reestructuración de Sumar, que debe definir su futuro y quien le encabeza en una asamblea el 14 y 15 de diciembre, en la que Errejón iba a tener un papel destacado. Díaz se queda, así, sin una de las figuras más reconocibles de la ejecutiva y con mayor proyección del movimiento que inició.

Las formaciones de la izquierda han puesto el foco en el apoyo a las víctimas. Ni siquiera Podemos, que tiene una guerra abierta con Díaz tras el estropicio con Sumar hace casi un año, ha hecho mucha sangre. El hecho es que a esta formación también se le ha preguntado si tenía alguna sospecha, puesto que Errejón fue un miembro destacado. "Las explicaciones corresponden a las organizaciones a las que pertenece: Más Madrid y Sumar", respondió la líder de Podemos, Ione Belarra, en una entrevista en Cuatro. La formación ha optado por limitarse a expresar apoyo a las víctimas. Lo ha hecho la exministra de Igualdad Irene Montero en X: "Acabar con la impunidad y romper el silencio no es fácil porque hasta ahora demasiadas veces se protegía al hombre con poder", ha dicho.