Las comunidades de vecinos podrán instalar placas fotovoltaicas por mayoría simple

BarcelonaBuena parte de los bloques de pisos de Catalunya se hicieron antes de que los proyectos arquitectónicos incluyeran medidas de eficiencia energética. El Govern calcula que el parque de viviendas existente emite un 10% de las partículas de dióxido de carbono que genera el país a la atmósfera. Ocho de cada diez hogares cuentan con un certificado energético E, F o G. Con el objetivo de potenciar el autoconsumo energético, el departamento de Justicia ha impulsado una serie de modificaciones en el Código Civil: a partir de ahora, las comunidades de vecinos podrán instalar placas fotovoltaicas solo con la mayoría simple de votos a favor, que también serán suficientes para sacar adelante otras medidas de aislamiento en las fachadas y trabajos de carpintería.

A través de un decreto ley también se han modificado otros puntos del Código Civil para que también baste con la mitad más uno de los votos a favor de los vecinos para sacar adelante obras que faciliten la accesibilidad y potencien las medidas de seguridad de las zonas comunes de los inmuebles, si así lo quieren los vecinos.

La única excepción de la norma es que el proyecto para las obras que se tengan que hacer supere las tres cuartas partes del presupuesto anual de la comunidad, una vez descontadas las subvenciones y ayudas. Entonces hará falta una mayoría cualificada de votos a favor para sacar adelante el proyecto. 

Los fondos europeos, clave

El Govern espera que, con los cambios, las comunidades de vecinos se animen a impulsar las reformas, que se podrán financiar con los fondos europeos Next Generation. Según los cálculos del ejecutivo, hasta 25.000 hogares se podrían beneficiar de esta línea de ayudas para subvencionar las instalaciones de autoconsum, que tiene un presupuesto total de 32,57 millones de euros.

Según los datos del Instituto Catalán de Energía, los inmuebles que tienen una calificación A ahorran de media hasta un 89% respecto al consumo de los que tienen la peor de las calificaciones, la G, y un 78% respecto a los inmuebles con calificación E, que es la que ostentan la mayoría de hogares.

El Govern también ha ampliado este martes el plazo para poder hacer de manera telemática las reuniones de vecinos hasta diciembre del año que viene debido a la pandemia.