"La ubicación del teléfono me indica que está aquí": golpe policial a la reventa de móviles robados

BarcelonaCasi un millar de móviles, 40.000 euros en efectivo y diecisiete detenidos. Éste es el balance del macrooperativo de los Mossos d'Esquadra desplegado este jueves por la mañana en el barrio barcelonés del Raval contra la multirreincidencia y la reventa de dispositivos electrónicos, según explican fuentes policiales al ARA. El golpe policial ha permitido desmantelar a un grupo que compraba teléfonos robados y se dedicaba a la receptación; es decir, se lucraba revendiendo material sustraído por otra persona. Se considera una de las principales redes de reventa de móviles en la capital catalana y el área metropolitana.

La actuación ha comenzado sobre las 10 h, con registros en cinco domicilios de la calle Carretes del Raval y en seis tiendas del barrio (entre ellas, una carnicería y una frutería situadas frente a los inmuebles intervenidos y un supermercado cercano). Los Mossos también entraron en el interior de un piso en Badalona y en otro en Sant Andreu de la Barca y los registraron. En total, diecisiete personas quedaron detenidas.

El modus operandi de esta red se basa en la compra de dispositivos tecnológicos, eminentemente iPhones, robados a turistas. Muchos se han sustraído en la capital catalana, pero también pueden recibirse robados en otros puntos de Europa. Según fuentes policiales, una vez adquieren los teléfonos, los miembros del grupo intentan acceder a ellos y envían mensajes a los contactos de emergencia pidiendo las claves (como el código PIN) para desbloquearlos. ¿Cómo? Haciéndose pasar por Apple o compañías bancarias. El móvil va pasando de manos y circula entre los domicilios de los implicados en la trama. Finalmente, se deshacen enviándolos a otros países de África y Asia.

Una vecina que vive a pocos metros de los pisos registrados ha explicado al ARA que no es de extrañar que llegue gente a la zona diciendo que les han robado el móvil: "La ubicación [del teléfono] les indica que está en este punto", asegura. También varios operarios de mantenimiento aseguran que desde el miércoles habían visto a agentes "revisando documentación" en la calle donde finalmente este jueves se ha efectuado la intervención policial.

En caso de robo de un teléfono móvil, los Mossos d'Esquadra recomiendan denunciar en comisaría la sustracción y aportar el IMEI del teléfono, que es una especie de matrícula. Este número es exclusivo, no lo tiene ningún otro teléfono del mundo, y cuando el dispositivo se conecta a una red le envía automáticamente ese identificador. Mediante esta información, la policía tiene mayores facilidades a la hora de encontrarlo en caso de pérdida o robo.

El macrooperativo de este jueves se enmarca dentro del plan Kanpai contra la multirreincidencia y los delitos contra el patrimonio que desde hace unos meses lideran los Mossos d'Esquadra en todo el territorio. En este caso, la intervención ha estado liderada por la División de Investigación Criminal (DIC) de Barcelona, con la participación de la Unidad de Información de Ciutat Vella y el Área Regional de Investigación de Barcelona.