El PP niega que el resultado en Catalunya cuestione a Casado
Feijóo hace un llamamiento a "examinar" los malos resultados pero puntualiza que no son extrapolables a nivel estatal
MadridNi una brizna de autocrítica del PP a escala estatal por lo que ellos mismos admiten que es un "mal resultado" en Catalunya, donde retroceden hasta lograr las peores cifras de su historia: solo tres escaños. A pesar del malestar entro algunos barones, que ven cómo continúa el declive autonómico en el Parlament y la concatenación de malos resultados para Pablo Casado –con la excepción de Galicia, donde Alberto Núñez Feijóo se pudo colgar la medalla de haber parado a Vox–, Génova no tiene intención de variar ni un milímetro el rumbo y argumenta que el resultado del 14 de febrero no es extrapolable al conjunto del Estado. Dos son los argumentos del equipo de Casado para explicar que la extrema derecha no solo los haya superado en Catalunya sino que casi haya cuadruplicado su resultado en escaños: la alta abstención, que consideran que ha perjudicado al "constitucionalismo", y el caso Bárcenas, en palabras del vicesecretario de comunicación del PP, Pablo Montesinos.
Pero es difícil desvincular la derrota de Alejandro Fernández, a quien mantienen la confianza para liderar el PP catalán, de la gestión de Casado. El jefe de la oposición en España se volcó desde el primer minuto en la precampaña y la campaña catalanas. Desde el principio desembarcó semanalmente en Catalunya y en campaña participó en siete actos, uno más que el presidente del gobierno español, Pedro Sánchez. Desde el domingo, con todo, guarda silencio. Solo lo ha roto con un tuit para felicitar a Illa por el resultado, pero no por la victoria, que atribuye al independentismo. La portavoz de los populares en el Congreso, Cuca Gamarra, ha vuelto a culpar hoy a Pedro Sánchez de haber "alimentado a los separatistas para llegar a la Moncloa".
El análisis de los resultados, el martes
A diferencia del PSOE, que hoy ya ha reunido a la ejecutiva para analizar los resultados, el PP se esperará a mañana para reunir al comité de dirección. Desde inicios de año Casado ha pasado al martes la reunión de la ejecutiva para contraprogramar el consejo de ministros. Pero la consigna es no variar el rumbo por mucho que Vox continúe comiéndoles terreno por la derecha. La prueba de fuego de la estrategia del jefe de la oposición en España será durante la sesión de control en el Congreso el próximo miércoles.
Desde el equipo de Casado sostienen que el resultado tiene que ser aceptado por todo el partido. "Todo el PP, todo, se ha comprometido en estas elecciones, todos nos hemos volcado en apoyar a nuestro candidato", ha dicho Montesinos a TVE cuando se le ha preguntado por posibles reproches en el seno del partido. De hecho, hay que tener en cuenta que la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, desembarcó también en Barcelona y no se han visto posibles réditos.
El único barón autonómico que ha salido del guion en público, como ya viene siendo habitual, es Feijóo, que ha hecho un llamamiento a "examinar" y medir "las causas" del batacazo. Ahora bien, en rueda de prensa, ha puntualizado también que son elecciones diferentes y no "extrapolables" y que "Casado es tan responsable del resultado catalán como Sánchez del gallego", cuando los socialistas consiguieron solo igualar resultados y el BNG los superó.
Mantener los pactos con Vox
Sobre el hecho de que Vox haya avanzado al PP, Génova tira de argumentario. Del mismo modo que ya hizo ayer domingo por la noche el secretario general del partido, Teodoro García Egea, su portavoz en el Senado, Javier Maroto, ha recordado este lunes a la SER que Ciudadanos multiplicó por nueve los resultados del PP en las elecciones al Parlament en 2017 y que después los de Casado multiplicaron por nueve los resultados de Albert Rivera en las últimas elecciones generales del 2019.
Pero ante el sorpasso de Vox, el PSOE ya ha reclamado tanto al PP como a Ciudadanos que rompan allá donde gobiernen juntos. Gamarra ha afirmado a Antena 3 que "lo que pasa en unas elecciones autonómicas no tiene que salir de este contexto y no tiene que afectar al resto de comunidades autónomas, sobre todo por responsabilidad": "La estabilidad de los gobiernos autonómicos es fundamental para afrontar un momento muy difícil", ha concluido.