Aleix Parisé: "Antes de casar a una pareja nos reunimos con una copa de vino para que me cuenten su historia de amor"
Periodista deportivo
Hace 16 años entraste en RAC1, justamente la temporada 2008-2009. Como el presidente de entonces, ¿tú también lo celebraste con cava?
— Más que el día de la final, recuerdo mucho las semis, con elIniestazo. El gol de Iniesta en Stamford Bridge fue histórico. Recuerdo que lo viví en un bar del barrio de Sants con unos amigos de mi infancia. Entonces, quizás porque todavía no tenía el paladar entrenado, bebimos cerveza. Fue una noche memorable, el bar no quedó entero. Ahora bien, cuando ya iba un poco más tranquilo, fui a Sabadell a casa de mi hermana y de mi cuñado y ahí sí que empezamos alguna botella de cava para celebrarlo.
Cuando en el 2020 te dijeron que estarías al frente del 'Tu diràs', ¿ya tenías el paladar entrenado?
— Sí, al final el paladar también madura, pero no sé cuándo hice ese cambio. Creo que el hecho de que hasta los 24 años trabajara en la discoteca Palladium de Sabadell –entonces tenía que cenar rápido– no dejaba espacio para que el vino fuera una opción, a lo sumo una cervecita rápida. También está vinculado con un cambio de estilo de vida, al final quieres beber algo que sea de cierta calidad y que sepas que se pone bien. Con el tiempo sí he acabado asociando el vino o el cava con celebración y alegría. Como decías, cuando me propusieron estar al frente del Tú dirás recuerdo que quise montar una cena con mi familia. Les dije que venía a cenar a casa de ellos y les pregunté: "¿Hace falta que lleve algún vino?". Evidentemente, como mi padre siempre cuida de que haya vino, y sobre todo cava, me dijo que no hacía falta.
¿Qué bebió?
— No lo recuerdo exactamente, pero probablemente habría algún cava de Maset. Básicamente, porque justamente a través de RAC1 escuchó uno de los anuncios de lotes del Celler Maset, los probó, le gustaron mucho y ahora siempre los tiene. De hecho, una de las cosas que le hemos regalado es una pequeña bodega que cabe 18 botellas para que pueda tener bien guardados todos los vinos y cavas que tiene en casa.
¿El cava es un tema generacional?
— Quizás sí. Ahora recuerdo que en marzo conseguimos ir al Celler de Can Roca por primera vez, después de un año de cola en la lista de espera, y que mientras yo opté por el maridaje, mi padre y mi madre hicieron todo el menú de la bodega con un cava. Concretamente con lo que te invitan a la entrada: lo probaron y lo encontraron tan bueno que cuando fue la hora del almuerzo pidieron que llevaran el cava que les habían servido.
Definitivamente no eres un hombre de cava.
— La verdad es que prefiero el vino. Pero aunque no sea lo mismo que el cava, este junio probé un champán francés por primera vez y me encantó. Fue en la boda de mi amiga Ángeles con Bastien, que es francés. Como otras muchas parejas, a ellos también les casé yo. Con ese champán sí hubiera comido y cenado. Lo que me frena a beber durante las comidas es que hay cavas muy gaseosas, que ya lo entiendo que deben ser así, pero el gas no me resulta agradable para acompañar la comida.
¿Casas parejas, también?
— Ya he hecho 8 o 9. Dicen: "Como trabajas en la radio y hablas muy bien, venga, ¡cásanos!". Me piden que haga de cura. Ya tengo un guión y me he comprado un traje y todo. De hecho, antes de casar a una pareja me reúno con los novios con una copa de vino para que me cuenten su historia de amor. Hacemos una cena o vamos a tomar una copa para conocer su historia ya partir de aquí elaboro un pequeño guión para hacer algunas bromas. ¡He llegado a casar a una pareja de amigos en Polonia!
¿Qué vino escogerías para un encuentro como éste?
— Me gusta más el vino blanco fresquito y seco. Me gusta Montsant, Priorat, Empordà... Pero recomendaré a uno de unos familiares míos que viven en Tossa de Mar y tienen un restaurante llamado El Petit. Quienes regentan el restaurante son Carlos y Nuri y hace un tiempo que decidieron plantar unos viñedos en su terreno, allí en Tossa, a nivel del mar. Se llaman Noooi, Noooia y Macu Ros. En poco tiempo ya han hecho vinos que han tenido el reconocimiento de Medalla Gran Oro y Hoja Gran Oro de Girona. Me gusta tanto el blanco, como el tinto, como el rosado, pero el blanco, que es el Noooi, es buenísimo.