Pide a sus hijos que dibujen 'la naturaleza' y se sorprenderá con el resultado
BanyolesHace unos días escuchábamos un episodio del podcast Punzadas dedicado a uno de los cuatro elementos: la tierra. Mencionaban un ejercicio precioso que una profesora universitaria planteaba a su alumnado: Observar qué pisaban durante toda una semana.
Las respuestas más generalizadas fueron parquet, cemento, azulejos, pero casi nadie dijo tierra. Y no lo vivían como una ausencia extraña. Porque, como se explica en el podcast, hemos aprendido a entendernos fuera de la tierra, como si fuéramos agentes externos, observadores de todo pero desconectados de nuestro origen. Y es que es evidente que no nos cuentan lo suficiente que humanidad, etimológicamente, viene dehumus: somos hijas e hijos de la tierra.
Un ejercicio con los niños
Nosotros le invitamos a hacer otro ejercicio, proponga a sus niños que dibujen la naturaleza, sin dar ninguna instrucción más, seguramente observará que hacen paisajes donde sale vegetación, ríos, mares, pero rara vez, aunque la tierra es nuestra casa principal, se dibujan habitando estos paisajes.
En cambio, si les pedimos dibujar su casa o un parque, suelen habitar estos espacios con niños y adultos. En el podcast, también compartían un paralelismo precioso: la tierra gira a un ritmo vertiginoso, el otoño y el invierno equivaldrían a su atardecer y su noche. La primavera y el verano son su día. Y como los humanos, que pasamos la noche descansando y nos activamos con la luz de la mañana, ella también descansa, regenera, y despierta justo ahora, con primavera.Nos parece una imagen bellísima para compartir con los niños.
Conocer y jugar en la naturaleza
Si necesita excusas equipe con guías de su entorno, prismáticos, salobres... Hágales observar estos ritmos, invítelos a descalzarse, explíqueles por qué es importante poner los pies en el suelo y pisar el suelo que nos sostiene, a nosotros nos parece un ejercicio de arraigo imprescindible para no de algo, los niños habitan y se hacen suyos los espacios con todos los sentidos cuando juegan, saltan, huelen y tienen experiencias significativas.
Y quién sabe, quizás el próximo dibujo de la naturaleza que pidan, saldrán ellos y vosotros reflejados.