¿Disney ha perdido su magia?
La propuesta de la compañía para estas fiestas, 'Vaiana 2', tiene color pero no tiene magia
- Dirección: David G. Derrick Jr., Jason Hand y Dana Ledoux Miller. Guión: Jared Bush y Dana Ledoux Miller
- 101 minutos
- Estados Unidos (2024)
- Con Auli'I Cravalho, Dwayne Johnson, Temuera Morrison y Nicole Scherzinger
Hace muchos años, en un mundo lejano en el que el pensamiento corporativo todavía tenía cierto método en su locura, Disney reservaba los estrenos cinematográficos a producciones originales con vocación de evento. Las secuelas se entendían como pura explotación de marca, dirigidas a fans acérrimos y destinadas al mercado doméstico. En este sentido, Vaiana 2 resulta excepcional, siendo tan sólo la cuarta secuela que el estudio ha decidido elevar al canon de la exhibición en salas, aunque el proyecto nació como serie para su plataforma de streaming.
Desde el punto de vista técnico, el cambio de categoría tiene sentido: la fluidez de la cámara digital, y el detalle que alcanzan materias como el agua y la piedra, así como las diversas criaturas que habitan el filme, convierten a la pantalla en un tapiz espectacular y colorista. Ahora bien, la golosa plasticidad de la propuesta debe arrastrar un andamiaje dramático y narrativo que, siendo benevolentes, podríamos definir como “poco trabajada”.
Vaiana 2 plantea una aventura que profundiza en los anhelos de conocimiento de la intrépida protagonista, que se lanza al mar movida por una profecía y las ganas de conectar con otros pueblos (y, de paso, reencontrarse con Maui, su amigo semidios) . Pero al igual que las canciones de la banda sonora resultan escasamente memorables, la peripecia deja un sabor a trámite, de episodio de transición encaminado a generar más secuelas (o temporadas) y que ni siquiera se molesta en convocar a un malvado con cara y ojos que, tal vez, habría hecho más excitante el viaje.