John Woo filma la venganza más silenciosa de la historia del cine
'Noche de paz', el regreso a Hollywood del director, es un 'thriller' sin diálogos y con escenas de acción contundentes
- Dirección: John Woo. Guión: Robert Archer Lynn
- 104 minutos
- Estados Unidos (2023)
- Con Joel Kinnaman, Catalina Sandina, Kid Cudi, Vinny O'Brian y Yoko Hamamura
El maestro de la violencia fílmica John Woo (Cara a cara) vuelve a Hollywood con una producción modesta sobre un hombre que se venga de las bandas criminales que mataron a su hijo. Lo más característico de la obra es que se emplea un artificio expresionista: como el protagonista no puede hablar a causa de una herida en el cuello, nadie más podrá hacerlo. La película transcurre sin diálogos y transmite una solemnidad que puede recordar el cine negro estilizadísimo de autores como Jean-Pierre Melville.
Resulta algo paradójico que un supuesto ejercicio de estilo desprenda un cierto aire despersonalizado. Las coreografías de acción remiten a la gravedad deAtómica y otros espectáculos posteriores a John Wick, tan alejados de la gracilidad casi etérea del Woo más paradigmático. Algunas notas emotivas sí remiten a aquel realizador que alternaba la violencia extrema con la sentimentalidad naïf, pero la rocosidad de todo ello (y nuestra ironía posmoderna) hace que no quede claro si debemos leerlas en clave de tragedia o farsa. Podemos creer que esta fantasía justiciera cuestiona el androcentrismo del hombre ensimismado en el duelo propio (él abandona a su mujer), pero también puede interpretarse como una afirmación del destino trágico (y potencialmente autoritario) del hombre que “ debe hacer lo que hay que hacer”, como decía Clint Eastwood en Cartas desde Iwo Jima. Alguna escena de acción agonística destaca por encima de un conjunto gris y, sin embargo, eficaz.