"Debemos amar la cultura que hacemos, no podemos depender del color político de quien gobierne"
Creadores y productores debaten sobre el impacto de la nueva cultura en un encuentro organizado por Barcelona Global
Barcelona"Es el momento de hablar en positivo, Barcelona culturalmente está haciendo eclosión", aseguró Ainhoa Grandes, presidenta de la Fundación Macba. Ha habido bastante optimismo durante el debate que ha organizado Barcelona Global, la entidad presidida por Ramon Agenjo, en el Recinto Modernista de Sant Pau, con el título Barcelona como capital de la nueva cultura. Con el periodista Álex Sálmon como moderador, el cineasta Marcel Barrena (director deEl 47), Jordi Herreruela (director del Festival Cruïlla), Isabel Vidal (presidenta de Adetca), el chef Sergio Torres y el productor Jordi Sellas, han hablado del impacto de la cultura y los retos que afronta.
Hay optimismo, según los ponentes, porque el consumo cultural es bueno. ¿Qué ha cambiado? Según Barrena, un cambio importante ha sido la financiación: "Las instituciones catalanas han creído en nosotros. Ha habido cambios en las herramientas de financiación y ha sido posible realizar películas en catalán, como El 47 y Casa en llamas".Barrena ha destacado que han sido un éxito de público y ahora son un referente para que las plataformas apuesten por las películas en catalán. Vidal ha remarcado el potencial creativo de Barcelona: "Madrid tiene un sistema escénico con los musicales como marca; en Barcelona, el 54% son creaciones de autores vivos catalanes, y eso no ocurre en muchos lugares del mundo". Buena parte de esa creatividad no se produce por inspiración divina, sino que proviene del intercambio, según Herreruela. "Una ciudad que propicia encuentros es una ciudad creativa; si eliminamos estos espacios de intercambio, perdemos la esencia de nuestra ciudad", ha defendido el director del Cruïlla, que también ha pedido crear grandes infraestructuras musicales.
La precariedad de los creadores
Sin embargo, a veces estos creadores deben superar muchos obstáculos o sobrevivir de forma precaria. "Los creadores están ahí, pero a veces no les facilitamos el camino", lamenta Vidal. "El 70% del consumo de los dispositivos móviles es entretenimiento. El impacto de la cultura es mayor que nunca y puede generar muchos cambios. Los países anglosajones tienen claro que la cultura no es sólo identidad y patrimonio, sino también economía. Aquí tenemos una gran tradición de creadores, pero cuesta mucho encontrar financiación para estas ideas, no hay tradición en ese sentido”, afirma Herreruela. Sellas valora que Barcelona puede convertirse en una de las grandes capitales del mundo en arte digital. El productor olotense destacaba el poder que puede tener la cultura: "Es el soft power; si no podemos tener grandes ejércitos o gran poder económico, podemos trascender en el ámbito cultural".
Grandes ha destacado la importancia de la educación para que la sociedad dé importancia a la cultura y la valore. Barrena también ha puesto sobre la mesa la importancia de medidas como llevar las escuelas al cine. "Estamos yendo a mejor. A mí me cató la cabeza cuando supe que Pedro Sánchez era el primer presidente español que iba al Festival de San Sebastián. Debemos creernos, amar nuestra cultura para no depender del color político de quien gobierne". Otro reto es llegar a todo el mundo, porque hay una parte de la sociedad que no va al teatro ni a los museos. " Tenemos que crear nuevos públicos, sobre todo atraer a gente joven porque en los teatros la media de edad del público es bastante alta", admitió el alcalde de Barcelona, Jaume Collboni.