El misterio de Stonehenge: el altar, de seis toneladas, viene de más lejos de lo que se pensaba
Según un estudio de la Universidad Curtin, una de las piezas más importantes de Stonehenge proviene de Escocia, en vez de Gales
BarcelonaStonehenge es uno de los monumentos megalíticos más conocidos en todo el mundo. Situado cerca de Amesbury, en Wiltshire, Inglaterra, a unos 13 km al noroeste de Salisbury, la espectacular construcción neolítica –levantada hace casi 5.000 años– sigue escondiendo secretos sobre su origen. Un estudio de la universidad australiana de Curtin aventura de donde podría provenir una de sus piedras más imponentes, el altar, que pesa seis toneladas.
Si bien investigaciones anteriores ya sostenían que Stonehenge no estuvo siempre situado en el mismo lugar de ahora, y que una parte de los megalitos –las piedras azules de uno de los círculos interiores– podrían provenir de un yacimiento neolítico de las colinas de Preselio, en el oeste de Gales, a unos 280 kilómetros de distancia, el estudio de la Universidad Curtin constata que al menos el altar vendría de más lejos, de la cuenca de Orcadian, al noreste de 'Escocia, situada a unos 750 kilómetros. "Después del análisis químico y la datación de la piedra hemos confirmado el origen escocés del altar, y hay que preguntarnos qué tecnología hizo posible que se pudiera transportar una piedra de estas dimensiones en torno al 2.600 a. C." , apunta Anthony Clarke, coautor del estudio. El origen del altar pone de relieve que las sociedades neolíticas tenían un "alto nivel de coordinación", lo que permite afirmar que "Gran Bretaña prehistórica presentaba un panorama fascinante", en buena parte aún desconocido.
"El transporte de una carga tan grande por tierra desde Escocia hasta el sur de Inglaterra debía ser extremadamente difícil, lo que indica que, probablemente, se había creado una ruta marítima que recorría la costa británica" , explica Chris Kirkland, que también ha participado en la investigación. Esto implicaría que había redes comerciales de larga distancia y niveles de organización más amplios y complejos de lo que se creía hasta ahora. "Actualmente ya podemos decir que este icónico altar es de origen escocés y no galés, y seguimos investigando para determinar de qué punto exacto del noreste de Escocia proviene", adelanta Richard Bevins, coautor del estudio y profesor de la Universidad Aberystwyth.