El trabajo bien hecho de Mirna Lacambra
La temporada de la Fundación Ópera Catalunya continúa con 'Tosca' en la Farándula de Sabadell
'Tosca'
- De Giacomo Puccini.
- Dirección musical: Sergi Roca Bru. Dirección escénica: Carlos Ortiz. Concejal de escenario: Jordi Golobart.
- Intérpretes: Carmen Solís, Enrique Ferrer, Luis Cansino, Juan Carlos Esteve, Pau Armengol, Jorge Juan Morata, Quim Cornet, Laura Obradors y Lluís Vergés
Ésta no puede ser ni debe ser una crítica como las demás. Más bien no será una crítica, porque el objetivo de este texto es agradecer públicamente a Mirna Lacambra sus 42 años de dedicación a la ópera en nuestro país. Desde Sabadell, y primero con el cobijo de Amigos de la Ópera de Sabadell y después de la Fundación Ópera en Catalunya, Lacambra ha sido una dama de hierro de la lírica. Entienda el símil no desde la vertiente de la intransigencia, sino de la tozudez para alcanzar lo propuesto durante más de cuatro decenios.
Gracias a esta sabadellense universal (urge que alguien haga la biografía y que repase su carrera como cantante en Europa, México y Estados Unidos), la ópera ha tenido presencia en poblaciones de toda Cataluña. Gracias a esta pequeña mujer físicamente, pero de gran altura humana y artística, se creó la Orquesta Sinfónica del Vallès. Gracias a esta maestra de maestros, numerosos cantantes jóvenes y talentosos han sido grandes figuras de la ópera tras su debut en la Farándula de Sabadell. Y todo ello con apoyo institucional, pero no siempre suficiente para acabar con el último objetivo de Mirna Lacambra: un teatro de ópera en Sabadell, que debería ser el segundo en importancia en Catalunya. Queda pendiente.
A lo largo de más de cuarenta temporadas, se han programado títulos de repertorio italiano, francés y alemán con resultados a veces desiguales al inicio, pero en los últimos años bordeando la excelencia, tanto escénica como musicalmente. Y Mirna Lacambra, como buena directora artística, ha controlado todas las etapas de creación del espectáculo, desde los primeros ensayos con piano hasta el estreno y su posterior gira por el territorio.
El listón queda muy arriba, el trabajo es inalcanzable si se mira atrás y los proyectos de futuro están ahí, porque Lacambra nunca ha desfallecido y ha hecho de la ilusión su motor vivencial y profesional. Hay que tomar el relevo y seguir trabajando por una iniciativa que debe tener continuidad. Adelante, pues, con la nueva etapa capitaneada por Jordi Torrents.
Coincidiendo con el centenario de la muerte de Puccini, el viernes se estrenó esta Tosca (ópera que Lacambra interpretó en su etapa como cantante) ya conocida en Sabadell con una producción eficaz del binomio Carles Ortiz-Jordi Galobart. El también sabadellense Sergi Roca Bru dirigió desde el foso una versión correcta, ocasionalmente carente del temple y la energía con la que Puccini dibuja los rasgos más siniestros de la condición humana, pero con buen rendimiento de orquesta y corazón.
Una soprano lírica siempre va bien para el rol titular, si bien a Carmen Solís le faltó incisividad spinto en los rasgos más dramáticos del personaje. El Cavaradossi de Enrique Ferrer tuvo nobleza y carácter, aunque el timbre es ingrato y el desgaste le empieza a jugar malas pasadas. a la teatralidad que Puccini pide en la partitura.
Ni el Barça conmemora su 125º cumpleaños con una victoria en casa ni el fin de la etapa de Mirna Lacambra culmina con una función operística redonda. Pero el reconocimiento y el agradecimiento al trabajo bien hecho no le quita nadie. Gracias, Mirna, por ser como eres y por tanto trabajo bien hecho.