Inglaterra hace un cambio de rumbo en la lucha contra el racismo
La selección inglesa rechaza seguir poniendo la rodilla en el suelo tras la denuncia de la jugadora Jess Carter
Barcelona"Está claro que tanto nosotros como el fútbol necesitamos otra vía para combatir el racismo". Es la respuesta de la selección inglesa tras conocer la denuncia de Jess Carter por sufrir comentarios racistas durante la Eurocopa. El combinado que dirige Sarina Wiegman había sido el único, junto a Suiza, al poner una rodilla en el suelo antes del pitido inicial del árbitra. Un gesto que se extendió en la Premier League tras el asesinato de George Floyd a manos de un policía en Estados Unidos.
Pero en las semifinales, Inglaterra rehusó seguir haciéndolo al ver que no ha tenido el resultado deseado. En un mensaje compartido en las redes, Carter, que ya ha eliminado su cuenta en X, asegura haber sufrido "una gran cantidad de racismo". La actual jugadora del Gotham estadounidense lo denuncia por evitar que otras personas tengan que vivir esta situación y concluye el comunicado diciendo que centrará todas sus energías en ayudar al equipo a ganar la Eurocopa. El CEO de la FA (asociación de fútbol inglesa), Mark Bullingham, ha condenado los actos y ha afirmado estar en contacto con la policía del Reino Unido. Una situación que ya vivieron Saka y Rashford, el nuevo fichaje del Barça, tras fallar sus penaltis en la final de la Eurocopa del 2021.
Un gesto que Adama Traoré quiso inculcar en el Barça
Poner una rodilla en el suelo antes de empezar el partido es un gesto que se utiliza para condenar el racismo y la brutalidad policial hacia las personas negras. Surgió a raíz del movimiento Black Lives Matter después de la muerte de George Floyd. Sin embargo, el primer deportista en hacerlo fue Colin Kaepernick. "No me levantaré para mostrar orgullo a una bandera de un continente que oprime a las personas negras", decía el quarterback y activista de los San Francisco 49ers, que se arrodilló durante el himno nacional. Después de hacerlo en el 2016, Kaepernick no ha vuelto a jugar en la NFL (competición de fútbol americano).
Con la vuelta a las competiciones, tras el parón por la cóvido, la Premier League fue una de las impulsoras al realizar este gesto en Europa. Después de unas temporadas en las que se hacía en cada partido, finalmente se quedó como algo puntual: se hace en la primera y última fecha del campeonato y en las jornadas dedicadas a combatir el racismo. Aunque el Barça femenino lo hizo en algún partido de Champions, sin ir más lejos en la eliminatoria ante el Chelsea de este año, no llegó a ser una acción habitual en los campos de España. De hecho, el único equipo español masculino al hacerlo fue el Barça. Sucedió dos años después de que se popularizara, en febrero del 2022, en la eliminatoria de Europa League ante el Napoli. ¿El responsable? Un catalán que venía de la Premier League, Adama Traoré.
El extremo, que estuvo cedido en el tramo final de temporada al conjunto de Xavi Hernández, dio una charla en el vestuario previa al duelo europeo, según explicó al The Guardian"Poner una rodilla en el suelo importa y fue positivo que lo hiciera un equipo español. Es una forma de explicar que debemos luchar", recordaba el futbolista de L'Hospitalet de Llobregat. repasa algunos de los momentos de su infancia. "Tú ibas a una discoteca en Barcelona y te encontrabas con gente negra que no podía entrar. En la escuela había cierta gente que defendía el "Personas negras, no". Sin embargo, sus padres siempre le ayudaron a no hundirse. es un trauma, que se ven feos, rechazados y que pueden intentar cambiar su piel o sus rasgos porque no se sienten aceptados", relata un Adama que asegura que es necesario hacer ver a las personas las consecuencias y el daño que hacen.
La lucha del racismo contra la liga
La Liga no impulsó el gesto de poner una rodilla en el suelo antes de empezar los partidos, pero en los últimos años ha llevado a cabo diversas iniciativas para combatir estas actitudes (desde el plátano que le lanzaron a Dani Alves en el estadio del Villarreal a los cánticos recientes contra Vinícius en Mestalla). Un caso mediático, el del futbolista del Real Madrid, que ha terminado en los tribunales y se ha convertido en la primera condena por insultos racistas en un estadio de fútbol en España. Los tres acusados fueron culpados por un delito contra la integridad moral con ocho meses de cárcel y la prohibición de entrar en cualquier estadio de fútbol durante un período de dos años.