El hallazgo inesperado de Koeman que lo revienta en la Liga
Óscar Mingueza, que empezó jugando como central en el Barça, destaca con golazos y asistencias en el Celta
BarcelonaA menudo se repite la frase que el fútbol da muchas vueltas. Hay quien dice ser un tópico y hay quien cree que es una realidad. Esto último pensará Óscar Mingueza, un catalán de 25 años que jugó en el Barça pandémico como defensa y ahora destaca por sus goles y asistencias en el Celta. Después de irse porque no tenía sitio en el equipo, se ha destapado en Vigo haciendo lo contrario que hacía en Barcelona. Antes evitaba los goles y ahora marca. Por eso se ha convertido en una pieza codiciada en los simuladores de ligas virtuales como Biwenger y Fantasy.
Su inicio de temporada es sensacional. Dos goles y dos asistencias en tres partidos le convierten nada menos que en el futbolista liguero con más contribuciones de gol. En agosto ya ha igualado su registro del pasado curso. Y todo esto desde la posición de carrilero. Una situación inimaginable cuando irrumpió en Can Barça. Ferran Sarsanedas compartió dos años con él en el filial y lo vivió: "Era el central suplente y nadie le imaginaba en el primer equipo".
"No era un jugador importante"
Mingueza, de Santa Perpetua de Mogoda, se ha pasado más de media vida en el Barça. Llegó como prebenjamín y compitió quince temporadas, dos de ellas en el primer equipo. Con todo, en el fútbol base no parecía tener un potencial muy alto, dice Sarsanedas: "En el Barça B no era un jugador importante y se planteó irse cedido". Hasta que un cúmulo de circunstancias hizo que Ronald Koeman, entonces entrenador azulgrana, apostara por él.
El técnico neerlandés, obligado por las lesiones de Umtiti, Piqué y Araujo, lo llamó a capítulo. Y Mingueza sorprendió a todos actuando a un gran nivel como marcador central derecho en una línea de tres. Era correcto defensivamente, solvente con la pelota y tenía capacidad para sumarse al ataque. Muchas cualidades que ha multiplicado en Vigo y que a Barcelona le costaron alguna bronca de su valedor.
Se convirtió en un futbolista importante y jugó como titular la final de la Copa del Rey contra el Athletic. Su buen rendimiento le valió la oportunidad de continuar en el Barça con Xavi Hernández, pero Mingueza nunca convenció al técnico de Terrassa. Durante el curso perdió protagonismo y acabó desempeñando un papel residual. En verano, club y jugador entendieron que la mejor opción era una salida y el Celta fue el destino escogido. El Barça mantiene una opción de recompra y el 50% de futura venta.
Méritos para Rafa Benítez, que lo recicló
El Celta fichó a Mingueza en el verano del 2022 para completar la plantilla y con el rol de central suplente. “Debutó en el minuto 90, con un 2-1 a favor e hizo un penalti que costó el empate. No volvió a jugar con ese técnico (Eduardo Coudet)”. Diego Otero, periodista que sigue al Celta, recuerda que los inicios en Vigo no fueron fáciles. Al cabo de unos meses, un nuevo entrenador, el portugués Carlos Carvalhal, lo probó por primera vez en la posición de carrilero derecho, donde disimulaba mejor sus carencias defensivas y potenciaba su criterio con el balón en los pies.
Ahora bien, el descubridor de la vertiente ofensiva de Mingueza fue un viejo conocido del madridismo, Rafa Benítez. Buscando alternativas a la mala situación del Celta, situó al catalán en la mediapunta. Una transición que nadie había imaginado. Sin embargo, Sarsanedas recuerda: "Tenía una técnica espectacular para ser central". Sea como fuere, el pasado curso, Mingueza pasó a ser un motor ofensivo del equipo, asociándose con Iago Aspas, la estrella gallega. Se convirtió en indiscutible y fue uno de los dos únicos futbolistas de campo de la Liga que jugó las 38 jornadas. "Durante la etapa de Benítez fue el mejor del equipo", sentencia Otero.
El estallido definitivo
Con la llegada del entrenador actual, Claudio Giráldez, Mingueza se ha confirmado como un futbolista eminentemente ofensivo. Lejos queda su etapa como central. Ahora juega de carrilero y destaca en campo rival y no en el propio. Otero se atreve a plantear una alegoría con un crack de recuerdo ingrato para el Barça, Trent Alexander Arnold: "Comparten el hecho de que, jugando desde el lateral, tienen más influencia en el juego que los centrocampistas".
Su inicio de temporada lo corrobora y, aparte de hacerlo bien, practica un juego bonito: los dos goles que ha marcado son preciosos. Sarsanedas apunta que "está volando porque se siente importante y tiene la confianza para intentar hacer cosas".
Sin embargo, hay que tener los pies en el suelo porque tan solo se han disputado tres jornadas de Liga. "No es un jugador de nivel Barça", cree Otero. Ahora bien, Sarsanedas tiene algo claro: "Si mantiene el nivel seguro que le veremos en un equipo de más aspiraciones". De momento, es necesario que continúe confirmando al Celta todo lo que ya ha demostrado.